Todos estamos expectantes por saber cómo avanzan las demandas entre Blake Lively y su excompañero de reparto Justin Baldoni. Sin embargo, la vida de ambos ha seguido su curso fuera de los juzgados: mientras él disfruta de su familia en Hawái, la actriz protagonista de Gossip Girl se ha dedicado a asistir a eventos públicos y promocionar nuevos proyectos.
Ahora, ese trabajo ha llevado a Blake a Inglaterra, donde ha recorrido distintos programas de entrevistas para hablar sobre la segunda parte de su película A Simple Favor, en la que vuelve a compartir créditos con Anna Kendrick y Henry Golding.
Lively, quien recientemente se dejó ver en la premier de Another Simple Favor —que se estrenará el primero de mayo a través de Prime Video— ha defendido su título como fashion queen con cada aparición en la alfombra roja. Su más reciente paso por las calles londinenses lo confirma, pues se atrevió a darle un giro extra al clásico Canadian Tuxedo.
¿Qué es el Canadian Tuxedo?
A esta tendencia también la conocemos como denim on denim, y su origen se remonta a los años 50. De acuerdo con la historia, el causante de esta moda fue el cantante estadounidense Bing Crosby, quien fue rechazado de un hotel de Vancouver por no vestir de manera formal con un traje de tres piezas, como dictaba la tradición en aquella época.
Tras hacerse público el incidente, el también actor recibió por parte de la firma Levi’s (entonces conocida como Levi Strauss & Co.) un saco de esmoquin confeccionado exclusivamente con mezclilla, en un intento por validar el textil como una opción formal y digna para cualquier ocasión.
Desde entonces, al atuendo de jeans y camisa o chaqueta de mezclilla se le conoce como esmoquin canadiense. Aunque ha habido quienes lo han llevado a niveles poco explorados —como los míticos atuendos de Britney Spears y Justin Timberlake en los American Music Awards de 2001—, sigue siendo uno de los conjuntos más democráticos y versátiles, incluso visto en la realeza.
Blake Lively apuesta por el Canadian Tuxedo en su visita a Londres
La actriz se ha sumado a las celebridades que apuestan por esta estética tan accesible y replicable, pero lo ha hecho añadiendo toques muy especiales a su outfit. Y no, no se trata solo de los accesorios que usó para complementar el conjunto, sino del corte y acabado de las piezas elegidas, que marcaron la diferencia en este estilismo.
Fiel a su estilo innovador, la originaria de Los Ángeles eligió un conjunto de pantalón y chamarra con acabado tipo joya, adornado con cientos de cristales distribuidos uniformemente por las dos piezas. Como base, en la parte superior llevó una clásica tank top gris que no le robó protagonismo al brillante atuendo; al contrario, permitió que el conjunto de dos piezas destacara.
El pantalón, de corte high waist y piernas amplias, sigue la silueta más popular de los últimos meses, aunque poco a poco la moda skinny vuelve a ganar terreno. Por su parte, la chamarra también es de corte recto y ligeramente oversize. Para darle un toque más edgy al look, Blake optó por llevarla de forma off-shoulder. En cuanto a los accesorios, se sumaron más brillos con sus pendientes y un llamativo anillo de diamantes. Todo el conjunto encontró cohesión con unos altos tacones de tira fina que estilizaron su figura al máximo.