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Después de una breve pausa del ojo público tras la intensa promoción de su película Twisters, Daisy Edgar-Jones reapareció con un look que ha capturado la atención de los amantes de la moda: un elegante y estructurado power suit en gris oxford. Una elección que no solo confirma su impecable gusto al vestir, sino que también se alinea con una de las tendencias más poderosas del año: el traje sastre femenino.
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Jones se había convertido en la definición de boho chic, pues den cada una de sus apariciones públicas había lucido piezas fluidas y llenas de movimiento, creando pequeños contrastes con accesorios chunky dorados. Ahora, la actriz se presenta con un atuendo mucho más serio pero completamente en tendencia.
El giro que Daisy Edgar Jones le da al power suit
La británica apostó por una versión moderna del clásico traje. Una chaqueta de líneas limpias, sin solapas, y hombros bien estructurados que evoca la idea de las siluetas ochenteras pero con un toque contemporáneo. Este giro inesperado llega con una falda tipo bermuda que reemplaza el pantalón tradicional, dando un aire fresco y atrevido al conjunto.
La actriz complementó el look con un par de stilettos a juego y gafas oscuras que reforzaron el aire sofisticado pero relajado y una melena que aunque lleva peinada, no deja de acomodarla de manera effortless.
El power suit conquista Hollywood
El power suit ha dejado de ser una prenda exclusiva del ámbito corporativo para convertirse en una declaración de estilo y empoderamiento personal. Desde la pasarela hasta la calle, el traje sastre se ha reinventado como todo un símbolo de fuerza, autoridad y elegancia moderna. Celebridades como Zendaya, Cate Blanchett, Florence Pugh y Tilda Swinton lo han adoptado con frecuencia, demostrando su versatilidad tanto en alfombras rojas y apariciones casuales.
Lo maravilloso del power suit es que si bien ha ganado popularidad, cada figura le da su propio giro. Mientras algunas apuestan por colores vibrantes o cortes oversized, otras —como Daisy— optan por la sobriedad de tonos neutros y siluetas más depuradas. Esta variedad refleja cómo este conjunto se ha convertido en una forma de autoexpresión, que va más allá de su connotación laboral y corporativa.
El conjunto que lleva Daisy mezcla minimalismo, estructura y su propia personalidad, nos recuerda que el verdadero poder está en vestir desde la autenticidad. Y si algo nos ha enseñado esta nueva era del tailoring, es que la elegancia no necesita exageraciones para dejar una buena impresión.