,type=downsize)
Sin lugar a dudas, el año que termina ha sido uno de los más retadores para la corona británica. En enero del 2024, pasadas las fiestas grandes de diciembre, se anunciaba que la popular princesa de Gales, Catherine Middleton, sería ingresada al hospital donde se le realizaría una cirugía abdominal. Tras semanas de recuperación y nulas apariciones, los fervientes seguidores de la futura reina inglesa especulaban sobre su salud —e incluso su vida—, siendo uno de los temas más relevantes en los medios internacionales.
Llegó marzo y con este una declaración en video de la esposa del príncipe William, el heredero al trono. Discreta, pero frontal, Kate explicaba que tras su procedimiento quirúrgico se le había detectado cáncer, por lo que pedía respeto para su familia y los momentos complicados a los que se enfrentaba, lo que muchos tomaron como un acto de valentía por parte de la princesa, pues desde entonces atravesaría un fuerte tratamiento que, con los meses, le regresaría su salud y calidad de vida.
© Jordan Peck|Getty ImagesA la par, su suegro, el rey Carlos III, actual monarca del Reino Unido, también enfrentaba una batalla contra el cáncer, y aunque su aislamiento social fue menos drástico que el de la royal más querida y popular de la familia real británica, también puso en la mira la fragilidad de la vida del sucesor de la reina Isabel.
Pasado el tiempo, a inicios del otoño, Kate volvió a la vida pública y, poco a poco, ha ido recuperando el ritmo de su vida y, así mismo, su capacidad de ser una fashion queen, pues a pesar de tener ciertos valores protocolarios para sus atuendos, la princesa siempre da de qué hablar por su impecable gusto o por los mensajes que disfruta mandar a partir de su vestimenta.
Este ha sido el caso de su más reciente aparición, la cual fue posterior a la Nochebuena. Junto a la familia encabezada por el Rey Carlos III, una guapísima Kate se dio cita en la iglesia de Santa María Magdalena, también conocida como Sandringham Church, donde acudió a la tradicional misa de Navidad y lo hizo con un atuendo elegante y de un color indispensable en esta temporada.
© Samir Hussein/WireImageEl look de la princesa Kate Middleton para Navidad
Impecable es la palabra que mejor describe el sofisticado y conservador estilo de la futura reina inglesa, y es que Kate Middleton siempre va perfecta, se trate de actos de gran relevancia y protocolo, o en los poco formales.
La muestra de su gracia y elegancia es su más reciente atuendo, el cual lució en el servicio navideño de Sandringham Church, lugar que ha elegido para dar un mensaje de esperanza a través de su propia ropa. Y es que luego del año que ha vivido tanto la heredera al trono como su familia política, todo parece indicar que el 2025 será una nueva oportunidad para vivir colmados de salud.
© Samir Hussein/WireImage, Getty ImagesSi bien la princesa se ha destacado en todas las ocasiones que ha aparecido junto a los Windsor en la misa navideña gracias a su look festivo por las texturas o colores, en este año se ha decantado por un atuendo sin estampados, pero sí con un color protagónico en estas fechas: el verde.
La futura reina sabe muy bien que el color verde y sus distintas tonalidades proyectan un fuerte mensaje sobre optimismo, tanto que se le ha dado el mote de “color esperanza” y, con miras a un nuevo año sin cáncer y con muchos proyectos, Kate ha elegido que sea el protagonista de su atuendo en este año.
Este color –ya por muchos considerado como un tono neutro– lo llevó en un abrigo de lana diseñado por Sarah Burton para Alexander McQueen, una de las firmas favoritas de Middleton. Debajo de este, un atuendo negro del que se pudieron ver un top de cuello redondo, botas y guantes, fue su apuesta segura para dejar brillar su tono elegido, el cual también replicó en su tocado, que le dio el toque más especial y navideño al look, ya que cuenta con un moño.
© Samir Hussein/WireImage, Getty Images
