No solo es la hija del tercer hombre más rico de Francia, también es dueña de un estilo muy sofisticado. Por sus venas corre la elegancia, pues su papá es propietario de uno de los conglomerados de firmas de moda y joyería más relevantes del mundo, el cual reúne casas como Gucci, Saint Laurent, Bottega Veneta, Pomellato y más.
Por parte de su madre también es latente la herencia del buen gusto, ya que Dorothée Lepère es una reconocida diseñadora de interiores francesa que –aunque muy oculta a comparación de su hija–, ha construido una sólida carrera a partir de su talento para imponer tendencias en decoración y por su amor por los artículos de calidad y gran diseño.
Pero eso no es todo. Desde 2006, Mathilde ha recibido mucha inspiración por parte de su popular madrastra, la talentosa actriz mexicana Salma Hayek, quien conquistó al magnate en ese año y se casó en 2009, ya siendo una familia multicultural y unida en la que, además de Mathilde, se encuentran su hermano Francois; Augustin James –hijo que François-Henri tuvo con Linda Evangelista– y Valentina Paloma, la única hija de la veracruzana con el empresario.
Con este exquisito antepasado y teniendo siempre una latente exposición al mundo de la alta costura, la moda y el diseño, era cuestión de tiempo para que Mathilde se convirtiera en un ícono de estilo. A través de sus populares redes sociales comparte algunos detalles de su lujoso estilo de vida y sus estilismos que nos confirman que es una it-girl en toda norma.