Su juventud, belleza y talento nos han cautivado; Emma Corrin es la nueva it-girl de Hollywood y tenemos muy claro por qué. Actualmente se encuentra en la promoción de su nueva película "Deadpool & Wolverine" y desde que iniciaron sus apariciones públicas, se ha vuelto un ícono de moda, pues su look andrógino y sus estilismos, –algunos ultra femeninos y otros muy atrevidos– la han hecho sobresalir junto a sus compañeros, Ryan Reynolds y Hugh Jackman.
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En Berlín, Londres, Rio de Janeiro y, más recientemente, Nueva York, Emma ha acaparado las miradas de los fotógrafos con atuendos que ha ideado su stylist Harry Lambert, quien también es responsable de los looks de otras famosas como Becky G, Joey King, Emilia Clarke y Katty Perry, entre otras y, con la joven protagonista de "My Policeman" ha logrado exponer su verdadero estilo ecléctico y audaz.
En sus más recientes fotografías, Corrin volvió a demostrar por qué es todo un ícono gracias a que portó una tendencia que, desde los años 2000, no había estado tan fuerte como en esta temporada. Se trata de las faldas globo, las cuales, gracias a su estructura, y muchas veces a la rigidez de la tela, dan volumen a las caderas de quienes la portan y, en esta ocasión, la joven de 28 años llevó esta pieza a su terreno, más arriesgado.
Emma lució un original vestido de tafeta, confeccionado especialmente para ella por la firma del diseñador Freddy Coomes. Esta pieza con top blanco y falda roja tiene una versión previa cuya parte interior era aún más abultada, sin embargo, para la actriz de "The Crown" se buscó algo menos ampón, pero que tuviera la misma esencia del efecto abombado.