La Princesa Diana, conocida por muchos como la “princesa del pueblo”, no solo dejó un legado de caridad y compasión, sino que también se convirtió en un ícono de la moda que trascendió generaciones. Sus elecciones de vestuario, dejaron una impresión indeleble en el mundo de la moda.
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Diseñado por David y Elizabeth Emanuel, este vestido es quizás uno de los más icónicos del siglo XX. Con su deslumbrante encaje, una cola de 7.6 metros y miles de perlas bordadas, fue un sueño hecho realidad para muchas jóvenes de la época.
Diana llevó este sofisticado vestido rosa de Victor Edelstein y la tiara Spencer a una recepción oficial en Brisbane. El vestido, con su corte clásico en combinación con la histórica tiara, presentó a Diana como una figura majestuosa.
Vestido Azul de chiffon de Catherine Walker (1987)
La princesa deslumbró en el Festival de Cine de Cannes con un vestido azul de chiffon con detalles drapeados yuna estola a juego, mostrando su gracia y elegancia en el escenario mundial.
Con una chaqueta incrustada de perlas estilo “Spencer”, este vestido obtuvo su nombre por su parecido con un traje que Elvis Presley podría haber usado. Diana lo lució en varios eventos oficiales, mostrando siempre su carácter vanguardista.
En un banquete en Mansion House, en honor a Robert Hawke, Primer Ministro de Australia, Diana lució un vestido turquesa, complementado con el collar de esmeraldas y diamantes de la Reina María.
Cuando la noticia sobre la infidelidad del Príncipe Carlos se hizo pública, Diana eligió un ajustado vestido negro por encima de la rodilla diseñado por Christina Stambolian, convirtiéndolo en un símbolo de empoderamiento y autoafirmación.
Durante su visita a Chicago, Diana asistió a una cena de gala en el Field Museum of Natural History vistiendo un impresionante vestido de Versace con zapatos de Jimmy Choo.
Uno de los últimos vestidos que lució en público antes del fatal accidente. De color azul claro, con detalles en pedrería, reflejaba una Diana madura, segura y lista para la siguiente fase de su vida.