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Poco a poco se comienzan a retomar las agendas de las Casas Reales, después del período vacacional de este verano, algunos royals han retomado actividad, como la Princesa Mary de Dinamarca, quien fue una de las primeras en comenzar con compromisos públicos este año. Después de haber pasado unos días en su natal Australia, visitando a su familia, la Princesa tuvo sus primeras apariciones la semana pasada, una de ellas acompañada con el Príncipe Federico, y una más en solitario, manteniendo la versión más casual de su guardarropa, antes de adentrarse por completo a su calendario habitual. A pesar de que en otros palacios todavía se mantienen las vacaciones, en Dinamarca, el calendario empezó de forma muy especial con la visita del presidente de Ucrania, Volodomír Zelensky y su esposa, Olena Zelenska. Después de varios meses complicados, en los que la Reina Margarita estuvo recuperándose tras una cirugía ortopédica que necesitaba, la monarca retomó su posición, siendo la anfitriona de la pareja ucraniana en el Salón de los Caballeros en el castillo de Christiansborg, en Copenhague. La visita era una de gran relevancia, ya que formaba parte del anuncio del envío de jets F-16 para apoyar a Ucrania, por parte de Dinamarca y los Países Bajos. Ante la relevancia de esta visita, la Princesa Mary fue la encargada de recibir a la pareja en el aeropuerto en el que también tuvieron la oportunidad de conocer las aeronaves que les serán entregadas. Dada la importancia de su posición, la Princesa Mary decidió elegir algunas de las combinaciones ya probadas de su guardarropa.
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El vestido de diseñador de confianza para Mary
Es bien sabido que Mary es una de las royals que prefiere confiar en un puñado de prendas y replicarlas a lo largo de los años con algunos giros. Es precisamente lo que ha hecho esta vez, llevando uno de los pocos looks que tiene de diseñador, que estrenó en junio del 2021. Se trata de un estiloso vestido negro con lunares blancos de la firma Prada. Gracias a su diseño con franjas tanto en la cintura, las mangas y el escote con sus respectivas botonaduras doradas, se percibe un juego visual que hace parecer que se trata de dos piezas.
Esta vez, combinó este sofisticado diseño con sus tacones Ellipsis 105 de Gianvito Rosi con terminado de pitón en color nude, que contrastaban con el bolso clutch en negro de la firma Quidam, ambas piezas conocidas de su guardarropa. El toque final recayó en la joyería que eligió para esta aparición, luciendo el brazalete modelo Nayarit de cuentas de la marca Mare Gold, así como su pulsera Vega de Dulong y un brazalete más de Rebekka Notkin.
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El look de la bienvenida
En esta visita, también se pudo ver a Mary en un papel más protagónico, acompañando a la primera ministra danesa Mette Frederiksen, en la recepción de los Zelensky, así como en la presentación de las aeronaves que se enviarán a Ucrania. En esta aparición, Mary llevó su blusa de corte fluido, mangas cortas y cuello alto, modelo Bonnie de Mark Kenley Domino. Lo combinó con sus pantalones de lino en café modelo Patroni de Max Mara, que combinaba con un cinturón en el mismo color de la firma italiana. En cuanto a calzado eligió unos Gianvito 105 -el modelo preferido de las royals- de Gianvito Rossi, en gamuza café. Los complementos incluyeron los aretes de Sophie Bile Brahe, su pulsera de Rebekkah Notkin y el mismo brazalete Nayarit de Mare Gold.
Después de este encuentro con el mandatario ucraniano, la Princesa retomó su agenda en el National Bereavement Center, del que es patrona. En esta ocasión, la Princesa retomó su vestido de Morten Ussing, de la colección primavera verano 2019. Lo combinó con su cinturón de Max Mara, así como con unos tacones modelo Spagna de Salvatore Ferragamo. En esta aparición la Princesa retomó sus conocidos colgantes con las iniciales de su esposo e hijos, de Halberstadt y Julie Sandlau, respectivamente, así como sus brazaletes de Ole Lynggaard. La Princesa agregó a sus accesorios en esta ocasión su reloj Tank de Cartier, así como su anillo con turmalina y diamantes de Dulong.