La Reina Letizia siempre ha sido una figura destacada en el mundo de la moda, y sus elecciones de estilo suelen ser un tema de conversación. Este año, en la recepción de Marivent, ha sorprendido a muchos con su elección de un vestido boho de Desigual, que no solo es un éxito de ventas sino también un reflejo de la fusión de la tradición con la modernidad.
El vestido, diseñado por Stella Jean, presenta un estampado inspirado en los mosaicos del Mediterráneo. Este detalle no es solo una elección estética, sino un tributo al territorio que da la bienvenida a la Familia Real durante su viaje. La mezcla de varios tonos de azul sobre un fondo blanco resalta la belleza del diseño, mientras se alinea perfectamente con el escenario balear.
La elección de Desigual, una firma reconocida por sus estampados, texturas y colores, refleja un cambio en la dirección de la moda real, que siempre ha sido más conservadora.
La Reina Letizia ha repetido la fórmula del año pasado, optando por un estilo veraniego y fresco. La elección de las alpargatas blancas de Macarena Shoes, parte de su colección desde hace años, demuestra su preferencia por la comodidad sin sacrificar la elegancia.
Las joyas con historia y significado de la reina Letizia
Las piezas de joyería seleccionadas, especialmente los pendientes en forma de estrella de oro y diamantes de Isabel Guarch, no solo son un accesorio elegante sino también un homenaje a la cultura local. Inspirados en la rosa de los vientos y realizados artesanalmente en oro amarillo de 18 quilates, representan una conexión con la naturaleza y la tradición mallorquina.
El toque de sencillez en el maquillaje y el peinado, complementó el diseño estampado y reflejó una visión moderna de la belleza real.