México es un país de colores, sabores, olores, en donde la tradición, cultura y alegría se unen para dar origen a una fiesta que se distingue mundialmente por la calidez de su gente. Lograr capturar esa esencia no es tarea fácil, a pesar de que han sido muchos los que a lo largo del tiempo han intentado hacerlo. El mundo de la moda ha sido uno especialmente inspirado por nuestro país, no por nada el mismísimo Christian Dior bautizaba uno de sus diseños como el vestido México en 1953 por la alegría de su estampado. Es esta íntima relación con la Maison francesa que fuera una gran noticia cuando se supo que Dior había elegido México como la inspiración de su colección Cruise 2024, siguiendo los pasos de Sevilla, Atenas y Marrakech que antes habían sido escenario de estas especiales muestras que permiten a la firma explorar más allá de las fronteras. Con una directora creativa como Maria Grazia Chiuri se esperaba que lo que mostrara en la pasarela fuera de especial significado, pero nada podría haber preparado para la experiencia que se vivió en el Colegio de San Ildenfonso este 20 de mayo.
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
MÁS NOTICIAS COMO ÉSTA
- Dior nos lleva a Bombay con su folclórico homenaje de color y pedrería
- Desde Sevilla, Dior ha impresionado con el desfile de su colección Cruise 23
La inspiración
Desde su llegada a nuestro país hace algunos días, María Grazia fue compartiendo poco a poco la inspiración detrás de su colección, dejando claro que Frida Kahlo era uno de los íconos en los que se había basado para ir formando algunos de los looks. "Amo el tener la oportunidad de reinterpretar el espíritu y guardarropa de Frida Kahlo con un espíritu contemporáneo", escribía junto a algunas de las imágenes de su mood board...lejos estábamos de imaginar lo que esta mente creativa había imaginado alrededor de un personaje tan emblemático de nuestra cultura.
Frida no era la única inspiración, en un país tan rico como el nuestro, era claro que habría otros elementos, pero también había otro hilo conductor: la mariposa. Insertando su propia cultura italiana, con visitas a los museos romanos y napolitanos (estos últimos de aquella ciudad que llega a tener curiosas coincidencias con nuestra capital), comenzaba el camino de Maria Grazia y Filippo Cosmelli para tomar a la mariposa, su significado e iconografía como parte importante de esta colección. ¿Cómo convergería una mariposa del Renacimiento con nuestras culturas precolombinas? El resultado se vería en la pasarela.
El gran desfile
En una muestra de buen augurio para los creyentes, los cielos conspiraron para que San Ildefonso se viera cubierto por una lluvia constante, sonora, pero sobre todo, casi poética. Amantes de todo el mundo realizaron el viaje a nuestro país, transportándose a una locación que servía como el pretexto perfecto para tener que ver nuestra Catedral, Templo Mayor y parte del Centro Histórico para poder llegar al escenario del esperado desfile.
Con los invitados sentados en los dos pisos del Colegio, comenzaban a sonar los acordes de la música regional mexicana y se veía en la explanada principal del lugar el look con el que abría esta colección, un vestido claramente inspirado en el que Frida llevaba en el retrato compartido por Maria Grazia unos días antes. Pero si se pensaba que esta sería la pauta de lo que vendría, se estaba muy equivocado.
Los maravillosos encajes tradicionales de la firma se rindieron ante los diseños típicos mexicanos. En los pasillos del lugar se vieron desde toreras charras con exquisitos bordados, hasta vestidos que emulaban a los de las escaramusas. Los pantalones y sacos con boradados que emulaban a la perfección a los de los caudillos de nuestra Revolución, se mezclaban con las faldas típicas mexicanas. La paleta de colores pasaba del negro al blanco, sin dejar al clásico rosa mexicano de lado. Las adelitas cambiaban las municiones por hermosos cinturones hechos en metal que contrastaban con la delicadeza de las faldas típicas de estos importantes personajes de nuestra historia. Pero lo prometido se cumplía, aquellos trajes que en una época Frida optó por utilizar, mostrando una vez más que era una mujer adelantada a su época, se vieron transformados con un exquisito viaje a la modernidad. Las mariposas se hacían presentes en collares y accesorios, todos ellos adornando armónicamente los cambios, en un sutil contraste con la fuerza de las botas que llevaban casi todos los looks.
Las notas de Sabor a mí sonaban a todo volumen, mientras que las modelos sorprendían a su paso luciendo la melena completamente recogida con trenzas interconectadas, muy al estilo de los años 20s. El orgullo de los artesanos que participaron en este desfile era palpable en cada uno de los looks. Entre el público se veía al Ingeniero Slim documentando algunos de los looks con su celular, sentado junto a Alicia Keys, en una de las mezclas de dos mundos que solo permite la moda. Periodistas, celebridades e influencers de todo el mundo, seguían con atención esta fiesta de color.
Cerrando en un tono fuerte y claro, comenzaron las notas de Canción sin miedo, el himno feminista que ha cimbrado con su poderoso mensaje. En el centro de la explanada aparecía una escuadra de mujeres en vestidos blancos con bordados rojos, y fue precisamente en medio de este cuadro que no dejaba a nadie indiferente que apareció Maria Grazia para cerrar su desfile, el mensaje uno que buscó unir la voz del mundo por una causa que ha afectado fuertemente a nuestro país.
Una carta de amor
Es así como el desfile Cruise 2024 de Dior ha sido una carta de amor a México, buscando representar dignamente los aspectos tan propios de nuestra cultura que podrían pasar desapercibidos a primera vista, pero que al conocer más a fondo nuestra tradición es imposible ignorar. Desde mayo del 2018, Maria Grazia comenzaba su idilio con México, inspirándose en algunos aspectos de nuestro país para la colección Cruise 2019, y después de Sevilla el año pasado, con rasgos que nos resultan tan familiares, pareciera que el que Dior nos eligiera como el primer país latinoamericano en recibir un desfile como éste era la progresión natural y vaya que ha resultado un paso perfecto. No podemos esperar a ver estas piezas dando la vuelta al mundo, pues, en definitiva, han retratado a la perfección lo que es México y sus detalles.