La marcada diferencia de estilos entre Jill Biden y Melania Trump

Jill Biden, originaria de Hammonton, Nueva Jersey, tiene 69 años y se dedica a la docencia. Desde 1977, está casada con Joe Biden, candidato a la presidencia de Estados Unidos. Ambos son padres de Ashley Biden, de 39 años, quien se desempeña como trabajadora social. Por más de tres décadas, Jill Biden ha dedicado su vida a la educación de los estadounidenses, enseñando inglés en diversos lugares, como las escuelas comunitarias en Delaware, además de una preparatoria pública y un hospital psiquiátrico para adolescentes. En enero de 2007, obtuvo su doctorado en Educación por la Universidad de Delaware, además de tener dos maestrías.

De enero de 2009 a enero de 2017, tuvo el cargo de la segunda dama de Estados Unidos, mientras su esposo fungió como el vicepresidente del país en la administración de Barack Obama.

Jill Biden acudió a apoyar a su esposo en el primer debate presidencial, el pasado 29 de septiembre en la Case Western Reserve University, en Ohio. Para la ocasión, la profesora usó un vestido verde de flequillos, el cual combinó con un par de zapatos Valenino Rockstud. A los expertos de la moda, dicho vestido se les hizo familiar, pues en otras ocasiones anteriores ya lo había usado.

Mientras algunas no se permitirían aparecer en un evento público con el mismo vestido, Jill Biden optó por hacerlo. Este es el mismo modelo, pero en un evento hace tres años. En esa ocasión Joe y Jill fueron invitados a la quinta gala de la fundación Save The Children en el American Museum of Natural History.

Pero esa no ha sido la única ocasión en la que ha sido captada usando el mismo diseño. En agosto de 2020, Jill presumió en las redes sociales este bellísimo vestido de cocktail azul cielo con estampado floral, de Dolce & Gabbana.

Dos meses después, Jill lo volvió a lucir. En esta ocasión lo usó para ir al debate final de su marido con Donald Trump, en la Universidad de Belmont, en Nashville, Tennessee.

En tanto, la primera dama Melania Trump, optó por los colores neutros. Para el primer debate, se dejó ver con un traje sastre a rayas de Dolce & Gabbana. En tanto, para el último encuentro entre Trump y Biden, la primera dama lució un vestido midi sin mangas de Christian Dior.

Jill también ha tomado algunos consejos de estilo del clóset de la exprimera dama, Michelle Obama. Para la Convención Demócrata, en agosto, la maestra llevó un diseño en color lavanda de Christian Siriano. En esta fotografía, Jill aparece con Kamala Harris, compañera de fórmula de Joe Biden.

Curiosamente, cuatro años atrás, Michelle Obama eligió un modelo azul rey de ese mismo diseñador para la Convención Demócrata de 2016, en Filadelfía.

Por más de 30 años, Jill se ha dedicado a la enseñanza y solo en dos ocasiones ha interrumpido sus labores como docente. La primera, cuando se convirtió en madre de Ashley, y la segunda, para apoyar la campaña presidencial de su esposo este 2020.

Apegada a su estilo, Jill eligió este vestido verde pizarra de Brandon Maxwell, para dar un mensaje sobre la pandemia del COVID y la reapertura de las escuelas en Estados Unidos. Además del traje que remontaba a sus días en las aulas, lo que hizo aún más emotivo este mensaje, fue que se transmitió desde la preparatoria Brandywine, en Delaware, donde años atrás fue maestra.

No solo Melania Trump ha tenido la oportunidad de acudir a la gala de los Premios Oscar. Jill Biden también ha sido invitada y sobre la red carpet ha dado un derroche de estilo y elegancia. Los Biden acudieron a la 88ª entrega, cuando Joe presentó a Lady Gaga en la entrega. En esa ocasión, también los acompañó la hija de ambos, Ashley.

Uno de los puntos centrales del equipo de Joe Biden ha sido incitar a todos los ciudadanos estadounidense a salir a votar. Sabiendo de la importante tarea que tenían, Jill Biden le dio un giro a su look con un calzado que estaba más que comprometido con la causa. La maestra fue fotografiada con un par de botas bajas de Stuart Weitzman, de $695 dólares, que tenían impresas la palabra VOTE (VOTA) en los costados.

Además de sus botas con causa, Jill también ha llevado el mensaje en accesorios como el cubrebocas, el cual se ha convertido de vital importancia en los últimos meses para combatir el COVID-19.