Los medios tonos quedan –casi– descartados esta temporada y son sustituidos por matices intensos, saturados y audaces. El bright pink es el más inesperado de todos; pero ya se ha colado en pasarelas, street style y hasta en la Met Gala 2019, imponiéndose como una de las tendencias que amalgama femineidad y glamour a partes iguales. Derivado de la mezcla del rojo y el blanco, es un color que no solo evoca sentimientos positivos, también pareciera condensar toda la calidez del verano, y eso se traslada a las prendas y accesorios de moda.
Este rosado tan particular se aleja de los pasteles –en especial del omnipresente millennial pink que reinó hasta hace poco–, y es capaz de inyectarle una dosis de energía vital a cualquier look diurno o nocturno que se elija. Por esta razón, los diseñadores, editores y celebrities sienten tanta predilección por éste. Sin obviar las pistas visuales que remiten a la década de los 80 y primeros años de los 90, podemos afirmar que el rosa brillante es la nueva sensación.
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Bright pink en multiples gradientes
Desde el fucsia, hasta el neón o el magenta menos opaco, todos se integran a la paleta rosa. Y lo mejor es que el resultado siempre es irresistiblemente chic. Solo fíjate en la top model holandesa Doutzen Kroes en este espectacular diseño de alta costura de Giambattista Valli, cuya voluminosa falda high-low con decenas de capas de tul reflejaban de la mejor manjera la estética “Camp” en el Museo Metropolitano. Jamie King, por su parte, combina piezas sólidas y estampadas en tres tonos; mientras Lupita Nyong´o es la visión más brillante en un conjunto de inspiración masculina cuajado de paillettes.
Máxima sofisticación
Favorecedor para mujeres de tez blanca, morena u olivácea, el bright pink fue protagonista en las recientes Fashion Weeks. En Milán cautivó a los asistentes al desfile de Philosophy di Lorenzo Serafini por su luminosidad; en París hizo lo propio gracias a su romántica modernidad de la mano de los impecables diseños de Valentino, y en Nueva York le imprimió visos etéreos a los elegantes modelos de Carolina Herrera. Desde entonces, ha ido permeando hasta ser una de las tendencia mainstream más imortantes.
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Un rosado imposible de ignorar
Gilda Ambrosio, Leandra Medine –en Tory Burch– y Thérèse Hellstrom ya se han apuntado a la pink fashion. Sus looks, tan refinado como rompedores, son ideales para exaltar los claros ecos de Pop-Culture asociados a este llamativo color. Sigue su ejemplo y opta ya sea por un vestido de mangas abullonadas, por un boiler suit texturizado o por un traje de dos piezas con oversized blazer, hay cientos de posibilidades ¡y con todas acertarás! Aunque si prefieres ir por lo más sencillo, inclínate por las blusas, sandalias o bolsos teñidos en rosa.
Con la llegada del verano, el bright pink también se dejará ver en beachwear, así que no esperes mucho y renueva tu estilo con contundentes total looks o acentos con los que te hagas notar donde vayas.