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El Presidente de la República de Francia, Emmanuel Macron, y su mujer, Brigitte Macron, comenzaron un tour de 3 días por Estados Unidos. En la recepción oficial de este acontecimiento, el presidente Donald Trump y su esposa, Melania, acompañaron a la pareja francesa a dar un paseo por los jardines de la Casa Blanca. Para esta ocasión especial, Melania quiso hacer un homenaje a la moda más selecta del país galo. Para ello, se ha decantado por un diseño perteneciente a una de las casas más emblemáticas de Alta Costura parisina, Givenchy. Su elección la acerca nuevamente al vestidor de la realeza, pues replica un look que tienen en su closet tanto la reina Letizia como la futura Duquesa de Sussex, Meghan Markle.
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El modelo con el que consigue esta nueva conexión con las mujeres en la realeza es un vestido con capa, creación de temporada de la que quedan muy pocas unidades a la venta y su precio es de $2,796. La capa está confeccionada en lana y lleva en contraste solapas de satén que versionan el siempre elegante esmoquin. Por su parte, el vestido es de seda, de corte camisero y se ciñe mediante una cinta en lazada. Aunque este diseño se presenta combinado con un pantalón a juego, la Primera Dama prefiere prescindir de esta prenda para lucir piernas, que estiliza gracias a unos tacones negros acharolados, de Christian Louboutin.
El vestido-capa, del que tiene una versión muy parecida en rojo y también de Givenchy, que llevó poco después de la toma de posesión de su marido como Presidente, es una de la elecciones de moda con las que la reina Letizia ha sabido impactar. Ella tiene uno de color verde oliva que estrenó en febrero de 2017 y que recuperó de su vestidor este 2018 durante la entrega de los Premios Nacionales del Deporte. La firma de esta creación se desconoce.
Sin tener que irnos tan atrás, el pasado sábado 21 de abril durante los actos de celebración del cumpleaños de la reina Isabel II, Meghan Markle replicó este look incorporando a sus elecciones de moda del año el vestido-capa. El suyo es en color azul marino y pertenece a Stella McCartney. A diferencia de la reina Letizia, que prefiere un estampado animal print, la futura esposa de Harry de Inglaterra se decanta por un calzado del mismo color que su vestido. Decisión que le acerca aún más al estilismo de Melania Trump.