En un mundo tan acelerado como en el que vivimos hoy, donde todo es urgente y nuestros niveles de cortisol están en el cielo, es inevitable buscar técnicas que nos ayuden a relajarnos o por lo menos reducir el estrés. Aunque muchos apuestan por la meditación o incluso diferentes ejercicios como la yoga y los pilates, hay una técnica que ha ganado popularidad en los últimos años: el breathwork.
Aunque de nombre parezca algo nuevo, el breathwork o simplemente ejercicios de respiración han existido desde hace siglos y se utilizan para entrenar el cuerpo y la mente, para regresar al aquí y el ahora. Además, estos ejercicios son parte de la rutina diaria de múltiples celebridades como David Beckham y Gisele Bündchen.
Cómo funciona el 'breathwork'
El breathwork consiste básicamente en ejercicios de respiración consciente y controlada, que se han utilizado por años como parte de ejercicios como el yoga y la meditación, pero que también se utilizan como un método en la medicina alternativa, pues se ha demostrado que tiene efectos positivos en la salud física, mental y emocional.
El breathwork está basado en la idea de que la manera en que respiramos, influye directamente en nuestro bienestar, y al modificar nuestra respiración, podemos tener cambios visibles en mente y cuerpo, y esto tiene que ver con la conexión entre la respiración y nuestro sistema nervioso.
Dependiendo de cómo respiramos, podemos activar el sistema nervioso simpático, responsable de la respuesta de lucha o huida (fight or flight) con una respiración rápida y superficial que aumenta la frecuencia cardíaca y eleva los niveles de cortisol. O por otro lado, conectar con el sistema nervioso parasimpático, encargado de la relajación y la regeneración (rest and digest) a través de una respiración lenta y profunda reduce el estrés y promueve la calma.
3 ejercicios de breathwork según tu necesidad
Para dormir
Para poder conciliar el sueño, es importante entrar en estado de relajación, por lo que necesitamos conectar con nuestro sistema nervioso parasimpático, pues es el encargado de la relajación. Para esto, es importante establecer una respiración circular consciente y lenta.
Respira lentamente por la nariz, inhala durante cinco segundos y exhala lentamente involucrando el diafragma en ambas, llevando el aire a toda la zona abdominal de manera consciente.
Para la ansiedad
Si eres una persona que sufre de ataques de ansiedad de manera recurrente, implementar técnicas de respiración puede ser clave para relajarte y aterrizar tu mente.
Cierra la boca e inhala durante cuatro segundos, aguanta la respiración por siete segundos y exhala por la boca durante ocho segundos. Repite este ejercicio tres veces más para completar cuatro series de respiración y verás como la calma regresa a ti.
Para regular el ritmo cardiaco
El sistema respiratorio está directamente conectado y relacionado con el sistema cardiovascular. Lo que se busca con este ejercicio es coordinar la respiración con el ritmo cardiaco, toma sólo 5 minutos y sus efectos valen la pena.
Lo único que tienes que hacer es inhalar en cinco segundos, lento y profundo, aguanta la respiración un par de segundos y suelta (exhala) durante cinco segundos de manera relajada, espera un par de segundos antes de inhalar de nuevo. Repite este ejercicio durante 5 -10 minutos.