Bien dice la canción de Andy Williams: It's the Most Wonderful Time of the Year… y al ser tan maravillosa, lo último que queremos es que se termine, pues significan 11 meses y medio de espera para que llegue de nuevo la Navidad. Es por esto que cada momento en esta temporada debemos hacerlo especial y aquí te vamos a mostrar una manera de lograrlo.
Para muchos países de habla hispana, el punto final de estos festejos es hasta el 6 de enero, cuando se conmemora la llegada de los Reyes Magos de Oriente a Jerusalén, donde el 25 de diciembre habría nacido el niño Jesús. Este acontecimiento marca el inicio de celebraciones litúrgicas de la iglesia cristiana durante el año y, para festejarlo, es común realizar una reunión alrededor de la mesa en donde se dispone un pan tradicional, dulce y delicioso que vale la pena preparar.
Si bien en cada región donde se disfruta de esta dulce tradición puede variar el sabor y la presentación del pan, el más consumido alrededor del mundo es el roscón de reyes, mismo que fue instaurado por los españoles y que, por su gran influencia en los países que conquistó, también se disfruta en otros lugares de Hispanoamérica, principalmente en México.
Así mismo, Portugal también celebra con un roscón que llaman Bolo Rei y son muy pocas las diferencias que tiene este con el que se prepara por influencia española, pues ambos son panes con frutos secos, pero en el caso de los portugueses cuenta con un toque dulce de azúcar glass.
Por otra parte, en Francia y en los distintos países en los que se siguen sus tradiciones, este día se conmemora con una tarta de suculenta masa de hojaldre. Esta preparación recibe el nombre de galette des Rois y en su interior esconde una dulce crema de almendras que la hace irresistible.
Independientemente de donde te encuentres, se realice o no esta tradición, siempre se pueden instaurar nuevas costumbres, por lo que aquí te dejamos la receta de una deliciosa rosca de Reyes que puedes disfrutar en familia y con una espumosa y humeante taza de chocolate caliente.
Receta de rosca de Reyes
Ingredientes:
- 500 gramos de harina de trigo
- 100 mililitros de agua
- 10 gramos de levadura seca instantánea o 20 gramos de levadura fresca
- 180 gramos de azúcar
- 140 gramos de mantequilla
- 4 huevos
- 1 cucharadita de sal
- 2 naranjas
Para decorar:
- Cantidad necesaria de fruta cristalizada o ate de distintos sabores
- 50 gramos de mantequilla
- 60 gramos de harina de trigo
- 60 gramos de azúcar
- Cantidad necesaria de azúcar glass
Procedimiento:
- Por ahora solo utilizarás los ingredientes principales. De estos, entibia 50 mililitros de agua y mézclala con dos cucharadas de harina, dos más de azúcar y toda la levadura que hayas elegido.
- Mientras esto actúa, ralla la piel de naranja con un rallador fino y sin que llegue a la parte blanca. Después de esto exprime y cuela el jugo y agrégalo a los 50 mililitros de agua restante y reserva.
- En el bowl de la batidora de pedestal con aditamento de gancho, pon el resto de harina y azúcar, agrega la sal, la rayadura de naranja y mezcla durante unos segundos.
- Poco a poco añade la mitad del agua con jugo de naranja y tres de los cuatro huevos, mientras continúas mezclando.
- Es momento de incorporar la primera masa de levadura, harina y azúcar, la cual debe estar burbujeando. Agrégala por completo y continúa trabajando la masa principal.
- Si crees necesario añadir el resto del agua con jugo de naranja, hazlo, pero la masa no debe quedar líquida, pues no agregaremos más harina.
- Deja trabajar la batidora durante unos minutos y cuando haya alcanzado una consistencia uniforme, será momento de sumar la mantequilla a temperatura ambiente.
- Una vez que añadas este ingrediente, notarás que volvió a perder consistencia la masa, pero no te desesperes y le agregues más harina; deja que la amasadora haga lo suyo durante, por lo menos, 5 minutos.
- Pasado este tiempo, rectifica que la masa se despegue de los bordes del tazón; si no sucede aún, déjala en la máquina durante más tiempo.
- Es momento de meter las manos. Sobre una mesa de trabajo, espolvorea un poco de harina (solo lo necesario para que no se pegue la masa) y colócala ahí, pues lo único que harás será bolearla con la finalidad de pasarla a otro tazón engrasado para que fermente durante una hora a temperatura ambiente.
- Mientras esto sucede, es momento de preparar las decoraciones que llevará arriba. En México es tradicional agregar una capa dulce a algunas partes de la rosca, pero no es necesario que la lleve. Si quieres prepararla, solo tienes que mezclar 50 gramos de mantequilla con 60 gramos de harina de trigo y 60 gramos de azúcar hasta formar una pasta homogénea. Sobre el resto de las frutas cristalizadas y el ate, rebánalos en tiras.
- Pasada la hora de reposo de la masa, saca todo el gas generado en su interior aplastándola, pero no es necesario que sea con fuerza.
- Con esta receta resultará un roscón muy grande y esponjoso, así que prepara una charola con un poco de mantequilla, pues es momento de dar forma.
- Sobre la mesa, forma una tira larga y no tan gruesa con la masa y una vez la tengas lista, junta los dos extremos para dar la forma ovalada o circular.
- Esta unión de las dos puntas se le llama nudo y lo mejor es envolver una punta con la otra, para evitar que se separe. Si vas a agregar un niño Dios como es tradición, este es el momento para esconderlo entre la masa.
- Cuando hayas formado la rosca, ponla sobre la charola engrasada y déjala durante 40 minutos más a temperatura ambiente y tapada con un paño limpio de cocina.
- Transcurrido ese tiempo, precalienta el horno a 180 °C (356 °F), mientras terminas el trabajo fuera del horno. Bate el huevo que quedó de los ingredientes principales y barniza la rosca, la cual debió crecer durante los 40 minutos.
- Con la pasta de harina, azúcar y mantequilla, haz algunas tortitas y distribúyelas por la rosca barnizada.
- En los espacios libres, coloca abundante fruta cristalizada o ate y lleva a hornear durante 25 minutos aproximadamente (o hasta que tenga un color dorado).
- Deja templar mientras reúnes a la familia y deja que cada uno corte el pedazo que comerá.