La Navidad no sólo es la temporada de celebraciones en familia o de excelentes delicias gastronómicas, pues también es la mejor época del año para comprar. Por todos lados las rebajas comienzan a inundar las vitrinas, orillándonos a considerar adquirir esos productos que tanto hemos deseado durante todo el año. Desde los clásicos regalos para poner debajo del árbol, hasta la oportunidad perfecta para estrenar durante las fiestas decembrinas, pareciera que todo durante estos meses se basa en consumir. Sin embargo, también es un buen momento para detenernos y preguntarnos ¿realmente necesitamos todo eso que compramos?
Si lo pensamos con detenimiento, posiblemente nos daremos cuenta que la gran mayoría de las cosas que compramos impulsivamente, no son tan necesarias como creíamos. Entonces, ¿por qué sentimos tanta necesidad de comprar y qué podemos hacer para evitarlo? La realidad es que el consumismo excesivo parece inevitable en un mundo como el actual donde solemos recibir estímulos por todos lados. Sin embargo, lo único que esto ocasiona es un desgaste emocional y económico. Por eso es que estamos en el mejor momento para aplicar el kakebo, la técnica que utilizan los japoneses para evitar el consumo excesivo.
Así puedes implementar el kakebo en tu día a día
Fue en 1904 cuando Hani Motoko, la primera periodista japonesa, creó el método kakebo como una manera de ahorrar dinero efectivamente. Esta técnica es sencilla y propone poner por escrito los ingresos mensuales así como los objetivos y planes de ahorro a corto, mediano y largo plazo. De acuerdo con esta filosofía, es necesario escribir todos los gastos que se realizan día con día para poder reflexionar sobre hacia dónde se está yendo el dinero y entender qué tan necesarias son las cosas que compramos y los servicios que adquirimos.
Crea un presupuesto mensual
La primera parte para aplicar este método es que, a principios de cada mes, debemos escribir los ingresos que estaremos recibiendo en los próximos 30 días y compararlos con los gastos fijos de cada mes (renta, gimnasio, suscripciones, etc.). Aquí mismo también debemos destinar una cantidad de dinero que se irá para ahorro durante el mes (el cual será intocable). Una vez que analicemos esto, descubriremos cuánto dinero nos queda para gastar en cosas no previstas (regalos, gustos, experiencias, etc.).
Registra tus datos día con día
Cada día es necesario que lleves un registro de todo lo que gastas en una misma libreta para poder hacer un resumen al final de la semana que te ayudará a descubrir en qué tipo de gastos se está yendo tu dinero. Semana tras semana podrás ir restando el dinero que te queda para hacer esos gastos sorpresa y así, evitar excederte.
Reflexiona al final del mes
Lo importante de este método es reflexionar mes a mes sobre cómo estamos utilizando nuestro dinero para identificar esos puntos donde podríamos estar ahorrando al encontrar alternativas o suprimir esos gastos por completo. Con esto en mente, podrás comenzar a ser mucho más consciente de la manera en la que compras y que tan necesarias son las cosas que tienes en casa.
Beneficios del minimalismo
- Mantendrás tu casa limpia y ordenada.
- Disminuirás tu huella ambiental.
- Te será más fácil concentrarte.
- Te sentirás mucho más ligera.
- Evitarás el estrés.