El arroz, alimento tan universal como versátil, es uno de los platillos más consumidos en América Latina en sus distintas versiones. Rojo, verde, amarillo, blanco, incluso dulce, las posibilidades son infinitas. Este rico cereal llegó a América gracias a los conquistadores europeos, especialmente los españoles, y así fue como el suelo latinoamericano comenzó su cultivo. Y aunque hoy en día pareciera ser algo que aprendes a preparar en casa y podría resultar muy sencillo, la verdad es que a muchos se nos complica que quede al dente. Para ello, unos sencillos trucos te ayudarán a mejorar tus habilidades de cocinero.
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Cómo preparar arroz blanco en 5 sencillos pasos
El arroz blanco, la versión más sencilla y universal, es la primera que debes dominar antes de seguir con las distintas versiones, además de que aprendiendo a cocinarlo, las demás serán pan comido. También, gracias a su sabor más neutro, es excelente complemento de cualquier proteína o guisado. Lo primero que debes saber es que existe una sencilla regla universal que no debes modificar: por cada taza de arroz son dos de agua, es decir, si vas a preparar 2 tazas de arroz, deben ser 4 de agua, y así sucesivamente. Tomando eso en cuenta, sigue estos 5 pasos para un resultado delicioso, lo único que necesitas es 1 taza de arroz blanco, 2 tazas de agua, 1 cucharadita de sal y 1 cucharada de aceite vegetal.
- En una olla mediana agrega el arroz blanco, las 2 tazas de agua y el aceite vegetal. Revuelve un poco.
- Pon a fuego alto hasta que hierva.
- Una vez en hervor, agregas la sal, bajas a fuego medio y dejas cocinar -por alrededor de 10 a 15 minutos- hasta que se consuma el agua por completo.
- Una vez que veas que se consumió el agua, y que al mover con un tenedor el arroz no se pega al fondo de la olla, puedes apagar la flama y dejar enfriar.
- Sirve con tu platillo favorito.
Consejos para sacarle el mayor provecho al arroz
Ya que eres un experto en arroz blanco, el cual además es un carbohidrato excelente para una dieta saludable, ya que no contiene gluten y aporta fibra, aquí te dejamos algunos consejos extras para sacarle el mayor provecho.
- Guárdalo siempre en tarros herméticos, en lugares secos y frescos para que el grano te dure más.
- Úsalo máximo en el primer año desde su compra.
- El arroz integral tiene una vida útil más corta.
- Si quieres darle un poco más de sabor, puedes dorar el arroz con un poco de aceite antes de agregar el agua. También puedes agregar cilantro durante su cocción.
- Es importante, después de apagar la olla, dejar reposar el arroz por unos minutos, de esta forma le damos el tiempo suficiente para que termine de cocinarse, con los granos separados y una textura ideal.
- No hace falta revolver demasiado: este es uno de los errores más comunes porque queremos evitar a toda costa que se nos pegue, lo cual no sucederá si tienes utensilios de buena calidad y sigues los pasos correctos. El problema de revolver el arroz constantemente es que empezamos a manipular su textura y su forma de absorber el agua.