Ocho ejercicios para tonificar hombros y brazos

De pie, con las piernas abiertas a la altura de la cadera, toma las mancuernas y sube los brazos en línea recta hasta que alcancen la altura de los hombros.

Regresa a la posición de inicio lentamente, bajando poco a poco los brazos procurando que todos tus movimientos; tanto ascendentes como descendentes sean controlados.

Flexiona ligeramente las piernas mientras mantienes los brazos a los costados.

Sujeta una mancuerna en cada mano y sube ambos brazos de forma simultanea hasta alcanzar un ángulo de 90 grados. Es decir, hasta que estos formen una línea horizontal con los hombros.

Este ejercicio es similar al anterior, solo que en este caso el movimiento partirá de la altura de los hombros hacia arriba.

Sostén firmemente las mancuernas y comienza con los brazos flexionados en ángulo de 90º para luego extenderlos por completo por arriba de tu cabeza.

Recostada con la espalda y las plantas de los pies apoyadas sobre el piso toma el par de mancuernas.

La distancia entre tus brazos debe ser la misma que existe entre tus hombros. Una vez en esta posición baja las mancuernas a la altura de tu pecho manteniendo los codos abiertos con un ángulo de 45º.

En este ejercicio, la recomendación es tomar un descanso de 30 segundos entre cada serie.

Este ejercicio puede realizarse con una o ambas mancuernas, esto dependerá de cada persona.

Comienza desde arriba sujetando la(s) mancuernas por encima de la cabeza; luego dirige los brazos para abajo hacia tu espalda con los codos flexionados hasta alcanzar tu espalda con las manos.

Una forma de asegurarte de estar realizando bien este ejercicio es cuidando que tus codos estén lo más cerca posible de las orejas.

Adopta la famosa postura de plancha, manteniendo tu cuerpo paralelo al suelo y manteniendo tu peso sobre los brazos y las puntas de los pies.

Desde esta posición, con la cabeza recta flexiona tus brazos hasta tocar el suelo. Este no es un ejercicio fácil, así que no te preocupes si no logras hacerlo en los primeros intentos. Continúa intentándolo y poco a poco verás como tu fuerza aumenta y cada vez es más fácil subir y bajar.

Aunque al principio podría parecer un ejercicio inofensivo, las repeticiones podrán hacerte cambiar de opinión.

El objetivo del curl es fortalecer la parte superior del brazo, tonificándolo y haciéndole ganar fuerza.

Para realizarlo, mantente de pie con los brazos extendidos hacia abajo, toma las mancuernas con la palma de la mano hacia arriba y flexiona los brazos hacia arriba hasta formar un ángulo de 90º.

Sustituye las mancuernas por una banda elástica, si esta tiene agarres te será más cómodo realizar el ejercicio.

Toma la banda por ambos extremos y písala con ambos pies por el centro. Ahora toma el extremo derecho con la mano izquierda y viceversa. Con este movimiento la banda frente a ti estará formando una X. Comienza el ejercicio levantando los brazos hasta que queden paralelos al piso, es decir, en un ángulo de 90º. Sube y baja controlando la tensión de la liga.