Conoce las “zonas azules”, lugares que guardan el secreto de la eterna juventud
La genética, el clima y el acceso a alimentos sanos son algunos de los factores que prolongan la esperanza de vida de los habitantes de estas regiones. ¿Las has visitado?
El paraíso terrenal sí existe. Si no nos crees, te invitamos a conocer un poco más sobre las llamadas zonas azules: Cerdeña (Italia), Okinawa (Japón), la Península de Nicoya (Costa Rica), la Isla de Icaria (Grecia) y Loma Linda (California). Estos destinos, además de deleitar tus pupilas con sus paisajes, cuentan con todas las condiciones necesarias para prolongar la vida de las personas.
Si bien la fuente de la eterna juventud hasta ahora continúa siendo solo un mito -que incluso según algunos historiadores llevó a Ponce de León a la península de la Florida como parte de una expedición en la que aseguran se embarcó el español en busca de estas aguas milagrosas-, lo que sí se ha descubierto, estudiado y comprobado es la existencia de cinco lugares en el mundo en los que sus habitantes tienen vidas más prolongadas y saludables.
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Pero, ¿qué tienen en común estos lugares?, según una investigación realizada por National Geographic y la Sociedad de Gerontología de Norteamérica, los elementos que entran en juego son: el factor genético, buen clima, contar con importantes zonas naturales, alimentos sanos, un entorno comunitario pacífico y un eficiente sistema de sanidad.
Descubre de cerca las zonas azules: fuentes de la eterna juventud
Loma Linda, California
El municipio californiano alberga en sus alrededores una población de cerca de 9 mil personas, que llegan a vivir hasta 10 años más que el promedio en Estados Unidos, reportado en 76,1. Al menos la mitad de sus habitantes pertenecen a la Iglesia Adventista del Séptimo Día, por lo que sustancias como el tabaco y el alcohol están fuera de su rutina. Los adventistas, aseguran que su longevidad es resultado de algunas reglas de alimentación, ejercicio y descanso que son parte de su rutina, como parte del respeto a su cuerpo, considerado el templo de su espíritu.
Nicoya, Costa Rica
La península costarricense es la más grande de ese país. Bañada por el Océano Pacífico, no es de extrañar que gran parte de la dieta de esta ciudad esté basada en el consumo de pescado, lo que muchos creen es la razón de su conocida longevidad. En esta región el clima es agradable, lo que permite la cosecha de variedad de frutas que también consumen de forma recurrente. Aunque alejada de los grandes lujos, su población asegura que cuentan con lo necesario. Una idea que se confirma ya que sus residentes tienen vidas prolongadas y de calidad, pues pocos desarrollan padecimientos crónicos.
Okinawa, Japón
Los habitantes de las islas al sur de Japón encabezan la lista de las personas centenarias, por lo que se han convertido en objeto de estudio de científicos que buscan develar el por qué de su longevidad. Un factor al que se le atribuye al menos el 30% de esta condición, es el de los hábitos alimenticios. La dieta japonesa en esta región incluye, como en Costa Rica, el consumo de pescado, además de los cereales integrales, verduras y soja, tofu y algas kombu. Sin embargo, aunque la alimentación sí es importante, esta también va acompañada de actividad física y un bajo consumo de azúcares.
Cerdeña, Italia
Su población es pequeña, solo cuenta con cerca de mil habitantes, entre los que las personas nonagenarias y centenarias representan un porcentaje importante. Michel Poulain y Gianni Pes, un astrofísico y un prestigioso gerontólogo italiano fueron los primeros en descubrir esta zona azul, a la que posteriormente se sumaron cuatro más. El mar rodeado por las casas instaladas en las laderas dotan a este sitio un clima apacible. En este lugar se homenajea y valora a los adultos mayores. Los ancianos forman parte activa de la comunidad y a quienes se les distingue con un retrato en blanco y negro, que colocan en las entradas de sus hogares al llegar al siglo de vida, cuando reciben el título de alcalde honorario.
Isla de Icaria, Grecia
El aire fresco es una de las principales ventajas de las que gozan los habitantes de la isla de Icaria, quienes se trasladan entre las subidas y bajadas de sus montañosos paisajes para llevar a cabo sus rutinas y a su vez les ayuda a conservar un buen estado físico. Los habitantes de este pequeño municipio son amantes del buen vino que se produce en la región y del que disfrutan en reuniones con familiares y amigos. Los residentes de Icaria viven 10 años más que la mayoría de los europeos y con mejor salud. Su dieta es rica en pescado y consumen pocas carnes rojas, el aceite de oliva es esencial para cocinar sus platillos, pero aseguran que el secreto de su longevidad se debe al consumo del té de montaña. Una infusión de hierbas secas como salvia, tomillo, menta y manzanilla, endulzada con miel de abeja. Aunque también llegan a desarrollar enfermedades cardiovasculares o cáncer, estos padecimientos se presentan en una edad más avanzada que en otras regiones.