Sabemos que estos días no son fáciles, y además de felicitarte por quedarte en casa y contribuir con la salud de todos, queremos ayudar para que estos días sean mucho más llevaderos. ¿Y qué mejor que enseñarte a preparar tus propios tratamientos de belleza?
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Con ingredientes que de seguro tienes en tu hogar, podrás crear mascarillas y exfoliantes que cuidarán de tu piel y cabello. Así que después de leer estas líneas, te sorprenderás de lo sencillo que puede ser consentirte y lo mucho que disfrutarás cada proceso. Toma nota que estás a pocos pasos de crear un spa en casa. Manos a la obra.
Esta mascarilla capilar es ideal para darle vida a las puntas maltratadas. Solo necesitarás dos cucharas de aceite de oliva, una cucharada de miel de abejas y un huevo. Mezcla todos los ingredientes y aplícalo solo en las puntas dejando que la magia actúe por 30 minutos. Retira la mascarilla con agua tibia, y recuerda hacer este tratamiento una vez por semana.
¿Por qué funciona? El aceite de oliva ayuda a nutrir y restaurar las hebras dañadas, mientras que la miel posee propiedades antioxidantes que protegen al cabello de la resequedad aportándole brillo y suavidad.
¿Qué hace el huevo? Ayuda a remover la grasa. Ten en cuenta que para cabellos secos lo ideal es solo usar la yema, y para cabellos normales tanto la yema como la clara.
¿Tienes aguacate en casa? Esta maravilla de la naturaleza es rica en ácidos grasos y vitaminas que ayudarán a pieles resecas e inclusas aquellas vulnerables al acné. También contiene propiedades que retardarán las señales de envejecimiento, así que imaginarás todas las maravillas que te regalará esta mascarilla en el rostro.
Solo tienes que remover la piel del aguacate y convertir la pulpa en puré. Colócalo en tu rostro durante 10 minutos y retira con agua fría. Sentirás tu piel limpia e hidratada.
Un tratamiento exfoliante será una excelente forma de aprovechar el tiempo que tienes libre. Para ello necesitarás de una taza de azúcar (preferiblemente morena), media taza de sal marina, dos cucharadas de aceite de oliva o coco, una cucharada de miel y si gustas otra de tu aceite esencial favorito y dos cucharadas de jugo de limón.
Mezcla todos los ingredientes en un bowl (ten en cuenta que no debes estar expuesta al sol porque usarás un cítrico) y aplícalo en toda tu piel dando suaves masajes en círculos.
Luego, retira con agua tibia y no olvides aplicar hidratante, pero recuerda que este scrub no es adecuado para tu rostro ya que sal gruesa y azúcar morena pueden irritar esa piel que es mucho más sensible. Para el rostro mezcla dos cucharadas de azúcar granulada con una de aceite de oliva o coco y aplica dando suaves masajes circulares.
Si sufres de ojeras o retención de líquido debajo de los ojos, ve a tu despensa y busca dos bolsitas de té verde. Remójalas en agua caliente Y mételas en la nevera. Cuando estén frías, colócalas debajo de tus ojos por 20 minutos.
El té verde tiene excelentes propiedades antioxidantes y ayuda a encoger los vasos sanguíneos aliviando así la inflamación.
Nuevamente el aceite de oliva y limón estarán en uno de tus tratamientos de belleza caseros, pero esta vez para cuidar de tus manos y uñas.
En un recipiente, mezcla tres cucharas de aceite de oliva con el zumo de medio limón. Remoja tus manos en la preparación al menos 10 minutos y masajea. Luego lava con agua y jabón. ¡Voilá! Notarás la diferencia.
Ellos también merecen consentirse en estos días de pausa. La piña tiene excelentes propiedades antiflamatorias. Así que mezcla su jugo con agua tibia y coloca los pies en remojo por 15 minutos. Verás como tus pies se relajan y quedan súper suaves.
¿Los ves? Son tratamientos realmente sencillos que además de contribuir con tu belleza, te ayudarán a aprovechar tu tiempo en casa. ¡Anímate!
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