Hablar de Katia Barros es hablar de color. Así lo ha dejado en claro la diseñadora a través de cada prenda que forma parte del universo de Farm Rio, firma creada por la carioca en 1997, de la mano de su colega, amigo y socio Marcello Bastos. La marca, que inició de manera independiente hace 24 años con un pequeño local ubicado en el mercadillo de Babilonia Feira Hype, actualmente es todo un fenómeno mundial, que ha logrado llevar la moda a otro nivel fusionándola con el arte, para crear una total fashion experience.
En entrevista con Glamour, en 2022, Katia confesó: “Cuanto más locales seamos, más globales podremos ser”; palabras que, como si se tratara de una profecía, hoy se materializan en más de un centenar de tiendas ubicadas en Brasil y las boutiques y puntos de venta localizados en América, Europa y Asia. Pero, ¿de dónde surgió este amor por la moda? Según la misma Katia, los primeros indicios de su pasión por las tendencias salieron a la luz cuando, de niña, vio a su abuela confeccionar sus propios vestidos. Estas imágenes que quedaron grabadas en su mente y su corazón se convirtieron en la fuente de inspiración para las primeras puntadas de la empresaria.
Katia y su grupo creativo han logrado crear su propio lenguaje a través de la moda, siempre inspirada en la impresionante naturaleza brasileña. Es por esta razón que la firma abandera una importante causa de índole ambiental, al contribuir a la reforestación de la selva amazónica –ecosistema con gran riqueza natural– con el compromiso de plantar un árbol por cada una de sus prendas vendidas, lo que la ha valido para posicionarse como una de las marcas más queridas en su país.
Además de su espíritu ecofriendly, como parte de sus proyectos, Farm Rio promueve e incentiva la inclusión de artistas, artesanos, colectivos y organizaciones no gubernamentales que reflejan el talento brasileño en todas sus formas. Una fórmula con la que ha logrado inmortalizar el espíritu de su nación en cada colección.
Haciendo de cada una de sus creaciones una oda al famoso carnaval, la diseñadora logra hacer una mancuerna perfecta con el maximalismo, convirtiendo esta tendencia en uno de los sellos distintivos de la marca que, por más de dos décadas, ha sido la responsable de iluminar los armarios del mundo con sus vibrantes mezclas de colores y formas.
Entre sus más recientes éxitos se suma la apertura de su primera boutique en Dubái. “Un paso significativo en nuestro viaje global, llevando toda nuestra autenticidad y energía brasileña al mundo. No puedo esperar a ver nuestros estampados y colores iluminar Dubai aún más” compartió en sus redes al presumir la noticia.
Y es que, a través de sus prendas, Barros ha sido capaz no solo de trascender fronteras, sino de desafiar la propia barrera del tiempo, para dejar en claro que el color y los estampados no son exclusivos del verano, deleitándonos con los más divertidos outfits invernales, dignos de presumirse en cualquier otra temporada del año, pero siempre fieles a su lema: “Dress in hapiness”.