La realidad de Stefania Bulbarella se cruzó con los sueños que tenía de algún día ser reconocida por su trabajo en diseño de proyecciones. Y es que, mientras un día admiraba a los artistas en cine, televisión y teatro; otro estaba trabajando a su lado.
La carrera de Stefanía en Broadway inició con estudios de teatro. La originaria de Argentina estaba decidida a construir un camino como actriz, pero poco a poco descubrió que su talento para el diseño de sonido era más grande y una pasión especial. No estaba equivocada, su trabajo la llevó a estar nominada este año para un Tony justo en esa categoría, gracias al diseño de video que hizo para la obra Jaja’s African Hair Braiding.
Según ha contado a La Nación, su trabajo es una perfecta combinación de "una producción escénica y el mundo digital". Y es que a sus 32 años, Stefania sabe que las exigencias del público son otras, pues el teatro no es indiferente a los avances tecnológicos, y usa esa herramienta para hacer de la visita al recinto algo inolvidable.
Esa idea de crear un ambiente increíble para las producciones de Broadway la llevaron a ser la cuarta argentina en ser nominada para un Tony. El camio original de sus sueños había cambiado un poco, pero su abuela sabía que lograría grandes cosas, pues según recalca en su charla con el diario, la miraba con orgullo imaginado que como actriz ganaría un Oscar.
Si bien hoy es reconocida por su trabajo y tiene amigos y colegas famosos, Stefania llegó a Nueva York como muchas latinas: sólo con ese sueño de triunfar en el corazón. "No tenía ningún contacto y hoy he sido nominada a un Tony", asegura contenta; además de alzarse con un premio a Outstanding Achievement in Theatrical Design por su trabajo en Vámonos. Y aunque parezca un sueño hecho realidad, la verdad es que todo fue a base de mucho trabajo, estudio y esfuerzo.
"Cuando llegué a Nueva York, no conocía a nadie. Ahora he estado nominada a un Tony. Es un sueño hecho realidad".
Fue a los 21 años que Bulbarella decidió salir de Buenos Aires con miras a Brooklyn. Ahí tomó un curso en el Instituto de Teatro y Cine Lee Strasberg y más tarde completó sus estudios en el conservatorio. Después de preparó para especializarse en dirección y tecnologías creativas, en donde descubrió una pasión mucho más grande que le permitió desarrollar su talento por completo.
"Miro hacia atrás y pienso en el esfuerzo, las horas, el llanto, el estrés; me doy cuenta de que le dediqué muchas horas y mucha vida a esto".
Las bases que tiene como actriz le ayudan a crear un trabajo más integral, pues es gracias a ello que cuando dirige un video, lo hace pensando primero como la protagonista y luego como la creativa. Y fue gracias a la pausa por la pandemia que logró demostrar su creatividad cuando los teatros, obligados a cerrar, hacían obras virtuales. Los elementos que ella utilizó pronto pasaron a las versiones en vivo, creando un espacio nuevo para el público y un gran salto en su carrera que no sólo le ha abierto posibilidades de triunfar, sino de seguir soñando en grande.