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En este 2024, se escribió una página muy importante en la historia del séptimo arte nacional, con la premiación de la primera mexicana como Mejor Actriz en el Festival Internacional de Cine de Cannes. En junio pasado, el nombre de Adriana Paz se escribió con letras de oro, en el cine internacional, por su trabajo en la cinta Emilia Pérez, dirigida por el francés Jacques Audiard, donde comparte créditos con Zoe Saldaña, Selena Gómez y Karla Gazcón, quienes también recibieron este premio. En un acto sin precedentes, el jurado decidió galardonar a todo el elenco femenino, haciendo un claro guiño a este filme que recibió críticas muy positivas durante su estreno donde consiguiendo 9 minutos de aplausos.
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Nacida en la Ciudad de México, un 13 de enero de 1980, Adriana Paz vivió una infancia feliz junto a sus hermanos, entre Morelos y la capital: “Fui deportista de niña, jugué basquetbol, hice gimnasia. Tengo hermanos, crecí rodeada de niños, me trepaba a los árboles, me aventaba de la avalancha”, contó la actriz, en diciembre pasado en el programa conducido por Óscar Uriel, TAP (Talles de Actores Profesionales), donde recordó su niñez:
“Estudié en escuela pública siempre y la verdad, es que hay mucha carencia de la educación artística y no tienes la oportunidad de descubrir tus talentos”.
Estudió Teatro en la Universidad Nacional Autónoma de México, fue durante esa época en la que conoció las grandes producciones de teatro y se enamoró de los musicales: “Yo fui acomodadora del Centro Cultural Telmex. Cuando fue la huelga de la UNAM, dije, ¿qué hago?, entonces, me metí de acomodadora y podía ver las obras, vi El Fantasma de la Ópera, pedía permiso y me quedaba, vi 30 veces cada una”, recordó sobre cómo nació la magia del teatro. Tras graduarse de la universidad, se fue a España por amor, momento en el que puso en pausa sus ganas de triunfar como actriz.
Tras un par de años en La Madre Patria, Adriana regresó a México donde retomó su carrera como actriz, para su sorpresa, pronto llegaría el casting que cambiaría el rumbo de su vida: Rudo y Cursi: “La amo y le agradezco todo lo que trajo en este proyecto”, comentó en el programa del Canal Once. A pesar de la proyección que le dio esa cinta a nivel internacional, la actriz reconoce que la situación le resultó muy retadora: “Me asusté. Yo decía, es que no hablo también inglés, fui postergando y no pasó nada”, reconoció la actriz.
En medio de la crisis personal más importante de su vida, un suceso llegó para sacudir la realidad de la actriz quien, en ese momento, decidió ir por su sueño en la actuación: “La muerte de mi abuela. Ahí dije: ‘A ver Adriana, hoy estamos, mañana no, ¿qué quieres?, ¿quién quieres ser?”, contó la actriz quien, a partir de ese momento comenzó a volcarse en su pasión. Fue entonces que los proyectos que marcaron su carrera comenzaron a llegar, como la cinta La Tirisia, cinta con la que consiguió su primer Ariel:
“Yo estaba embarazada sin saberlo. Y mi hijo se llama Cosme, por uno de los personajes” -Adriana Paz-
A lo largo de su carrera, Adriana Paz ha estado nominada en dos ocasiones más para un Ariel y, en 2017, resaltó en la terna a Mejor Actriz Revelación, en los Premios Goya por su trabajo Autor. La mexicana también cuenta con una importante trayectoria en la televisión, tanto mexicana, como internacional. Destaca su labor como actriz en proyectos como Perdida, Coyote, Vis a Vis, Rebelión, El Colapso, Capadocia, El encanto del águila, Dios Inc, ganándose a pulso un lugar importante entre las actrices más destacadas de México.
En el terreno personal, Adriana Paz debutó como mamá hace 10 años con la llegada de su único hijo Cosme. Desde hace cuatro años, está casada con el actor colombiano, David Trejos. Convertida en un ejemplo de perseverancia, este año, Adriana Paz se convierte en la primera actriz mexicana en ganar en Cannes con un musical que recordará el resto de su vida: “Yo no había visto la película y es impresionante, yo no paraba de llorar, cuando encendieron las luces y tenía a Rossy de Palma llorando enfrente de mí, vi a Marisa Paredes, a Salma Hayek estoy en las nubes todavía”, contó en junio pasado en entrevista con Adela Micha.