Nuria Diosdado se ha convertido en uno de los rostros más reconocidos en el mundo deportivo, especialmente en su disciplina: la natación artística, deporte que practica desde que tenía apenas cinco años. Sin expectativas, la joven de Guadalajara entró al agua por primera vez para poner remedio a su hiperactividad. Sin embargo, siete años más tarde, un viaje a Barcelona cambió sus objetivos.
“Cuando cumplí 12 mi papá me llevó a Barcelona al campeonato mundial de mi disciplina. Ahí, al ver a las campeonas y a la selección mexicana caminando para su competencia regresé enamorada del deporte”
Ahí comenzó a gestarse la historia de éxito de esta mexicana, una historia que nada tiene que ver con la casualidad, pues la jalisciense dedica cuerpo y alma a alcanzar cada una de sus metas en el terreno deportivo y en lo personal.
Con solo 15 años, Nuria tomó una de las decisiones más importantes para su vida. Luego de ser convocada por Selección Nacional Mayor de Natación Artística, la joven dejó su natal Guadalajara para mudarse a la Ciudad de México y continuar su sueño en el agua. Una prueba que hoy se siente orgullosa de haber superado, como ella misma contó a Hola Américas, al dedicar unas palabras a su yo del pasado.
“Vas a tener un camino que ni tú ni nadie se imagina. Habrá golpes duros, pero vas a ser capaz de salir más grande de cada uno. No te preocupes porque siempre vas a salir avante. Déjate sorprender por la vida, hay cosas maravillosas por venir y aquello que siempre imaginaste te está esperando a la vuelta de la esquina”.
En 2015, Nuria fue distinguida como “Ciudadana del mundo” premio otorgado por el Comité Internacional de Turismo Educativo del Mundo Joven Fest, convirtiéndola en la primera mujer deportista en México reconocida con esta presea.
La capitana de la Selección Nacional de Natación Artística de México ha participado en tres Juegos Olímpicos (Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020). Razón por la que no es de extrañar que, tras su reciente triunfo en el Mundial de Natación Artística 2023 celebrado en Egipto, donde se alzó con el oro en la categoría de dueto libre; además de ocupar el primer lugar del podio por su brillante participación en Nado Sincronizado, la jalisciense ya haya puesto su mente y corazón para encaminarse a sus cuartos olímpicos, la importante contienda deportiva que se celebrará en París el próximo 2024.
Nuria es considerada la máxima figura mexicana en la historia del nado sincronizado, un título que avalan las 9 medallas de oro, una de plata y una más de bronce en Series Mundiales que ha ganado en sus más de dos décadas de trayectoria.
Tanto como ser una atleta de alto rendimiento, Nuria disfruta también de su rol de hija, hermana, tía y esposa viviendo el ámbito personal con la misma pasión con la que la vemos ejecutar cada movimiento en sus rutinas dentro del agua. Es licenciada en Administración y tiene dos maestrías; en Mercadotecnia e Imagen Pública. En noviembre de 2021 contrajo matrimonio con Javier Arnaiz, quien fuera su preparador físico. Fan declarada de las conchas de vainilla, Nuria además posee una personalidad muy maternal, razón por la que confiesa que entre sus próximos planes está el de formar una familia. “Me encantaría ser mamá. Es un capítulo que me encantaría vivir pronto, una vez que ponga fin a mi carrera deportiva”