Desde muy pequeño, Julio Vaqueiro supo que quería dedicarse profesionalmente al mundo noticioso. Ese sueño lo guío a lo largo de la vida, llevándolo hacia los lugares correctos para obtener la experiencia y el carácter necesario que años más tarde lo pondrían como el presentador de Noticias Telemundo, así como entre el gusto del público.
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Julio es un verdadero hombre de familia, que celebra y disfruta sus logros de la mano de su esposa, Fer Barrios, y sus tres hijos Santiago, Isabela y Jerónimo; quienes no sólo admiran a papá, sino que a su corta edad empiezan a entender su profesión y la grandeza de verlo en la pantalla de la televisión.
En entrevista para HOLA! Américas, Julio hace un repaso por su carrera, los logros que ha tenido gracias a su profesionalismo y cómo es que, de la mano de un gran equipo de trabajo, lleva a los televidentes la información más relevante del día, especialmente antes, durante y después de la época electoral.
El originario de Querétaro, México, y ganador del Emmy por Mejor Cobertura de Noticias de Última Hora en Español, ha tenido a grandes personalidades frente a su micrófono, tanto del ámbito político como del espectáculo y los deportes. En un balance sobre los nombres que ha llegado a conocer de esta manera, nos cuenta sobre sus mejores experiencias y quién está en su lista de pendientes.
Julio, tienes una carrera de años que te ha llevado a ser uno de los presentadores más reconocidos en Telemundo, ¿cómo nace este esta pasión por ser periodista?
Bueno, Tengo la suerte de que siempre supe que quería ser periodista. Desde muy pequeño me gustaba mucho escuchar la radio cuando mi papá nos llevaba al colegio; escuchar las noticias. Siempre me gustó mucho escribir, me gustaba leer el periódico que llegaba a mi casa, hojearlo. Veía a mi papá leerlo y a mí me gustaba también estar enterado. Desde, no sé, por ahí de terminando la primaria, yo ya tenía muy claro lo que quería.
Y después, por suerte, se fueron dando las cosas. Yo soy de Querétaro, que es un estado en el centro de México. Y yo quería estar en el lugar en el que pasan las cosas, así es que me fui a estudiar a la Ciudad de México la carrera de periodismo. Ahí es donde tuve mis primeras oportunidades.
Trabajé en Grupo Editorial Expansión, y otras cosas se fueron dando para ser corresponsal de Telemundo en la Ciudad de México. Estuve trabajando ahí, sirviendo a la audiencia hispana en Estados Unidos, pero desde México y después me fui a Los Ángeles. Me invitaron a formar parte de la estación local de Telemundo en Los Ángeles, California, estuve ahí también algunos años y luego finalmente ya me moví a la cadena en donde, con el privilegio de servir a la gente a las 6:30 de la tarde.
¿Siempre tuviste ese interés por la nota dura? ¿Alguna vez te llamó la atención algo un poquito más light?
Sí, claro que sí. Pero siempre supe que a mí me gustaba la nota dura. Pero sí, es verdad que en esos primeros pininos, pues por colocarme acabé haciendo un poco de todo y acabé diciendo que sí a todo.
Siempre tuve esa mentalidad de decir que sí a todo en estos momentos en los que hay que aprender y tomar esos riesgos. Pero siempre me gustó más la nota dura y más que la nota lo que me gusta es contar la historia de la gente, hablar con la gente y ver cómo las noticias le impactan a la gente, y lo que nuestros televidentes tienen que decir sobre lo que está sucediendo en Estados Unidos.
Claro, sobre todo en estos momentos.
Sí, sí. En este momento es un es una responsabilidad enorme. Es también un privilegio, una suerte, estar ahí en primera fila siendo testigo de lo que está pasando. Y es una gran responsabilidad para llevarle a la gente que nos ve en casa las noticias e informales, con precisión, lo que está sucediendo y bueno, respaldado con un gran equipo de corresponsales, productores, técnicos, camarógrafos y especialistas.
¿Cómo vives las coberturas especiales? ¿Qué hay detrás, desde el momento en que te asignan o la propones y todo lo que conlleva?
¡Imagínate! El tema de cobertura de elecciones es como la final de la Copa del Mundo de fútbol, pero para los periodistas de política. Es la noticia que venimos esperando durante años, que puede definir el futuro del país.
Para mí es un gran reto. Fue la primera vez que estoy al frente de la cobertura, ya he estado en Telemundo, en otras coberturas electorales, pero bueno, ahora me toca estar al frente. Y se siente esa emoción, ese nervio, y sobre todo, el compromiso con la gente que nos acompaña en Telemundo.
Es contar las cosas como son, ni más ni menos, es algo muy simple, muy sencillo de decir los hechos, los datos, lo que estamos viendo en la calle con la gente que estamos entrevistando y eso contárselo a la gente de la mejor forma explicada posible.
¿Qué sientes de ser considerado uno de los galanes de los noticieros?
¡Ándale! Ah, pues muy agradecido de que la gente así lo vea. Hacemos nuestro trabajo con mucho compromiso, con mucha dedicación. Me apasiona lo que hago y más en este momento, que es tan clave. Los latinos son tan importantes en este país. Las campañas finalmente, se han dado cuenta de esto por nuestros números, 36 millones elegibles para votar, los lugares en los que vivimos que pueden realmente hacer la diferencia en estos Estados.
Y para mí hablar de eso, tener la oportunidad de dar voz a esa fuerza y de informarle a esos votantes, pues es un privilegio, así que yo agradecido con que nos vean, con que les guste el trabajo que hacemos, porque lo hacemos con mucho compromiso.
¿Cómo ves estos cambios en la forma de comunicar a través de la televisión?
Este es un momento muy, muy interesante. Estamos obligados a estar en todas partes, no solo en la tele, no. También tenemos que generar contenido para las redes sociales, para el Instagram, para TikTok, para Facebook, para YouTube, para las plataformas digitales, para streaming. Hay que estar en todas partes y no olvidar la televisión lineal, porque la gente sí que sigue viéndola y sobre todo cuando hay eventos importantes, lo notamos en nuestros números.
La gente al final confía en lo que hacemos porque cuando hay una noticia de última hora, una tragedia o algo importante como estas elecciones, la gente viene a vernos. Y también tenemos esos números en las redes sociales en Telemundo. Realmente se ha hecho un esfuerzo muy grande por diversificar nuestras plataformas. Tenemos mucha penetración y eso es buenísimo porque es una forma de llegar sobre todo ese público.
Al final lo que tenemos que hacer es buen contenido, buen periodismo. Las bases son las mismas, es ir al lugar de los hechos, ver lo que pasa, contarlo y digerirlo para que la gente lo entienda. Lo contextualizamos y explicamos porque es algo importante y no importa en dónde lo cuentes, en la tele, en las redes sociales, en la radio o en o en una revista como ¡HOLA! El trabajo es el mismo.
Hablando de crear contenido, tienes tu canal de YouTube, tu cuenta en Instagram, pero ¿has considerado la idea de hacer un podcast?
Sí, mira, tengo un canal de YouTube, pero como puedes ver le tengo que echar muchos kilos. Ahí me falta dedicarle tiempo. Sí, estoy en las redes sociales y los podcast me encantan. De hecho, en este ciclo electoral hicimos una alianza de noticias Telemundo con Radio Ambulante Estudios y trabajamos en una serie de podcast. Es un recorrido por los Estados péndulo, esos Estados clave que podían definir la elección presidencial en Estados Unidos, para entender a los votantes latinos que viven ahí.
El podcast, además, te da como otro tono, otra oportunidad de llegar más íntimamente a quien te escuche y también a quien entrevistas. A veces las cámaras de la televisión cuentan otra cosa. La imagen es muy poderosa. Y el Podcast te permite entrar, quizá con más tiempo, con más detalle a la vida de las personas y contar contarlo diferente.
Entonces ya también lo hicimos. Ojalá que la gente lo escuche y ojalá podamos seguir haciendo más podcasts de noticias Telemundo, porque sí, es algo que me gusta mucho.
Estás en un medio en el que te mantienes informado de todo lo que sucede alrededor, ¿que opinas sobre la salida de Jorge Ramos de Univision?
Bueno, él es un referente de la televisión. Tiene toda mi admiración y agradecimiento, además porque nos ha abierto las puertas a muchos periodistas hispanos, tanto él como otros de su generación. Jorge es un ejemplo a seguir.
Nosotros todos los días, pues competimos con él, pero esa competencia nos hace mejores. Y ahora, al ver su partida, francamente no merece más que mi agradecimiento y mi admiración.
Hablando un poco más sobre el lado personal de tu vida, ¡te vemos feliz en familia con tus hijos! ¿Te ha tocado vivir este momento en el que tus hijos ven a papá en la TV y entienden tu profesión?
(Risas) De repente se dan cuenta y me preguntan. Tratan de ponerle sentido. Luego aquí juegan en la casa… ¿puedes creer que a veces juegan al noticiero? Uno se hace el camarógrafo y otro agarra el micrófono y están jugando ahí como al noticiero.
Yo nunca les dije nada, pero de repente me los encontré haciendo ese juego y dije: ‘Qué chistoso’. Además, tengo la suerte de estar en la calle o comiendo en algún lugar o en el aeropuerto y alguien me reconoce, hace el favor de acercarse, saludarnos y mis hijos ven eso. Yo les explico que lo que hacemos es dar las noticias la gente y solo tratamos de hacerlo lo mejor posible, que no se nos tiene que olvidar que lo que hacemos es para servir a la gente.
¿Entre esos juegos les ves madera de periodistas? ¿Crees que sigan tus pasos?
Híjole, no sé. Que sean lo que sea, lo que quieran. Al grande le gusta mucho leer, es muy curioso. Y los otros, pues todavía están chiquitos. Isabela es muy alegre, Jerónimo también está chico y es muy simpático, muy carismático. A ver qué deciden, todavía falta.
¿Estás por celebrar 11 años de casado con tu esposa, Fer Barrios, tienen algo en mente para celebrar?
La verdad, no lo hemos pensado. Siempre tratamos de hacer algo para festejar nuestros años de matrimonio. Es una mujer increíble. ¿Yo qué te voy a decir? Estoy muy enamorado de mi esposa y es la columna vertebral de mi familia, francamente.
¿En qué momento has sentido más el apoyo de Fer en tu carrera?
Siempre, en todo. Desde el principio ella siempre estuvo. Siempre apoya lo que hago y yo trato de apoyar lo que ella hace también, por supuesto. A veces mi trabajo requiere de mucho viaje y es muy demandante, pero siempre, para mí la prioridad es estar con los niños y con mi esposa.
¿Cómo te recibieron tu esposa e hijos el día que llegaste a casa con un Emmy?
Les dio mucho gusto. Al final es un reconocimiento para mí, pero también para todo el equipo de Telemundo. Sin un equipo la televisión es imposible. Entonces es un reconocimiento para todo el equipo. En mi familia lo celebran mucho y yo creo que en la familia de todos en noticias Telemundo lo celebran porque, uno no trabaja para los premios, pero un premio sí te recuerda por qué haces las cosas y es un aliciente para volver a poner energía y seguir echándole muchas ganas a todo.
Debes tener aún muchos sueños por cumplir en tu carrera. Te hemos visto entrevistando a sin fin de personalidades en política, entretenimiento y demás; ¿quién te hace falta por entrevistar?
¡Uy, pues ahorita te lo digo, el presidente Donald Trump. No nos quiso dar una entrevista en este ciclo electoral. Creo que hubiera sido muy bueno para la audiencia; escucharlo, hacerle preguntas difíciles como se las pudimos hacer a Kamala Harris. Y escuchar sus puntos de vista. Bueno, no pude. Ojalá que en algún momento se pueda, esa es una entrevista que me quedé con ganas. Haber hecho.
¿Cuáles son esos dos momentos top en tu carrera?
Bueno, híjole, escoger dos me cuesta, pero pues el primero que me viene a la mente es la entrevista que le hice al Papa Francisco, que fue una experiencia única. Muy afortunado yo de poder estar sentado ahí. La verdad que a veces no me la creo; pero lo agradezco mucho. Digo después de trabajar mucho para llegar a ese momento, y se dieron las cosas. Lo disfruté mucho.
Y dos, pues bueno, obviamente el nombramiento de estar al frente de noticias Telemundo y de representar a un equipo que todos los días trabaja con muchísima pasión, con mucha fuerza, con mucha entrega para para llevar las noticias a las personas que hablan español en Estados Unidos. Y a la vez también ser quien le dé esas noticias a estos inmigrantes o familias de inmigrantes que todos los días trabajan y dan lo mejor en este país. Ocupar esa posición, bueno es uno de los privilegios más grandes de mi vida y el más grande de mi carrera, sin duda.
Pudiste entrevistar a Kamala Harris, ¿Qué fue lo que más te gustó de charlar cara a cara ella?
Es una mujer muy alegre, Kamala Harris. Y me parece valiente sentarse y dar una entrevista con un periodista que sabemos va a hacer preguntas difíciles, que va a volver a preguntar y preguntar.
En este ambiente mediático en el que estamos quizá hay pocos incentivos para que los políticos se sienten con un periodista a hablar, porque pueden hacer llegar su mensaje de otras formas. Pero quien se sienta con un periodista a hablar, pues reconoce que es importante para la democracia, para la gente, escuchar esas preguntas y esas respuestas y por eso es admirable que los políticos lo hagan.
A diferencia de otras ocasiones, las campañas se tardaban mucho o lo hacían de una forma muy superficial y después se olvidaban de los votantes latinos. Y creo que ahora la fuerza de los latinos se ha hecho sentir y las campañas lo saben. Y Kamala Harris lo sabe y Trump también lo sabe. Por eso ese esfuerzo tan intenso por atraer a esos votantes. Y eso también lo celebro.
Con ese privilegio también llegan algunos malos comentarios, ¿cómo manejas el tema de los haters?
Sí, híjole, pues hay de todo en las redes sociales. A veces un no da la cara ni el nombre, y son cosas que las personas no te dirían cuando te ven en persona. Y me quedo con eso al final.
Cuando yo camino en la calle, la verdad que la gente me saluda con mucha amabilidad y yo eso lo agradezco infinitamente. Y claro, lo que hacemos no tiene que gustar a todo el mundo, lo que puedo decir es que lo hacemos con toda la honestidad y con todo el esfuerzo de servir a todo el mundo.