Hay muchas cosas que unen a Daniela Calle y María José Garzón, mejor conocidas como Calle y Poché, y una de ellas es su interés por sumergirse en la profundidad del ser humano. Esa inquietud las llevó a crear Human of Interest: El Podcast, un espacio en el que han explorado las historias de sus famosos invitados con una perspectiva totalmente transparente. A propósito del lanzamiento de la segunda temporada, esta mancuerna única compartió con HOLA! AMÉRICAS las reflexiones y aprendizajes que le ha dejado este proyecto.
Danna Paola, Camilo y Gianluca Vacchi son tan solo algunos de los famosos que han pasado por los micrófonos de Human of Interest, el exitoso podcast de Calle y Poché que ha llegado ya ha su segunda temporada por medio de Uforia, la plataforma de audio de TelevisaUnivision. Probablemente nunca imaginaron hasta dónde llegarían cuando surgió en ellas la inquietud de crear este espacio.
“Vimos un documental de un actor en donde entrevista él a su terapeuta. Y nos tocó mucho por muchas cosas que nosotras trabajamos en nuestro tipo de terapia”, contó Poché al hablar de la motivación detrás de la creación de su podcast. “Y obviamente esto no es terapia, nuestro podcast no es eso, pero nos inspiró mucho a ver qué pasa si hablamos de estos temas personales y nuestras experiencias, y traemos gente a que haga lo mismo”, recordó.
“Y por más que no es terapia nuestro podcast, creo que sí motiva a la gente a ir a terapia”, agregó Calle, resaltando el impacto de su proyecto. “La gente se empieza a sentir identificada quizás porque vio a su cantante favorito, o porque nos vio a nosotras, ‘¿será que de pronto me haría bien hablarlo en terapia con alguien?’”, confesó, A su vez, las también autoras hablaron de su experiencia trabajando juntas como pareja, de los retos que han enfrentado y también de los aprendizajes.
C: Felices, honestamente, muy emocionadas. Creo que la gente siempre suele ver como el producto final, cuando ya pasó por todos los filtros que va pasando, desde organizar al invitado, organizar las preguntas, organizar la producción, como que todo eso. Entonces, es muy emocionante cada vez que algo ya sale afuera y al mundo. Es como si uno ya acabara de nacer un bebé, literal. Entonces, nos tiene muy contentas y más ahora que está la primera temporada y esta segunda en Uforia, que nos tiene súper contentas.
P: Creo que hay demasiados podcasts. Creo que ahora vas a cualquier plataforma que no sea de podcast y lo que te salen son podcasts. Creo que lo difícil es precisamente destacar, tener una idea innovadora, ser original, traer algo distinto a la mesa, tener conversaciones que de verdad te aporten algo, creo que son diferentes desafíos que todos salen de lo mismo. Hay demasiados (podcasts) ahorita. Entonces, eso es lo que tenemos en mente siempre para cualquier episodio, para renovar precisamente la temporada, tener todas estas cuestiones en mente para sacar el mejor resultado.
C: Creo que el concepto es muy fuerte y creo que muestra una parte de los invitados y tanto de nosotros como muy desnuda, como sin máscara. No, es como un podcast en donde queremos la respuesta políticamente correcta. No. Sino desde quién eres tú, por qué, cómo, qué te duele, qué te da culpa, qué te hace sentir todas estas cosas. Y creo que el tener también estas ganas de encontrar esa vulnerabilidad y esa autenticidad en los invitados es lo que a la gente le ha gustado mucho y ha conectado.
P: Por el trabajo personal que hemos venido haciendo y que seguimos haciendo, creo que eso nos ha dado herramientas, incluso en nuestra relación o en nuestra vida, para comunicar cosas que son incómodas o difíciles y tener ese tipo de conversaciones. Y dos, porque creo que al nosotras abrirnos creo que el invitado entiende que es un ambiente seguro y ellos también se proponen a también sacar algo a la mesa. Creo que si estuviéramos cerradas y fuera solo este rol como de entrevistador, no se sentiría. Acá la idea no es hacerte preguntas y que la otra persona responda, sino como tenemos una conversación.
P: Cuando dijiste anécdota, pensé en algo nuestro, y es en siempre tener un backup (respaldo), porque nos pasó en una grabación en México, que después de dos episodios se robaron todos los equipos y absolutamente todo. Se salvó el audio al final, pero fue un gran aprendizaje de vida tener un backup, estar preparado. No uno, como cinco backups, literal.
Y en cuanto a historias de los invitados, estoy pensando, creo que se me viene a la cabeza porque es el más reciente, es el episodio con Camilo. Él contaba muy detallada una escena que es la que a él le toca las fibras del corazón que fue una cena con los papás, que a él le tocó mucho. Y creo que siempre hay momentos así en todos los episodios que uno lo siente también dentro del corazón de uno, pero ese es el que se me ocurrió ahorita.
C: Que todos somos tenemos una historia que, por más diferente que sea, es muy similar a la experiencia humana. Y eso me parece espectacular, me parece fantástico poderlo ver de esa forma.
C: Siento que este proyecto como tal, Human of Interest, no ha sido lo más difícil, no lo ha sido el trabajar juntas, porque uno para el proyecto, al contrario, siento que sirve muchísimo que seamos nosotras dos, que seamos tan diferentes la una de la otra, que las dos nos conozcamos tantísimo la una de la otra. Porque podemos justamente lanzar más ejemplos, hablar con más comodidad, porque justamente uno está acompañado de esa persona que sabe todo de uno. Y más cuando estamos en un espacio en Human of Interest que queremos ir súper profundo. Tenemos una muy buena forma de comunicarnos.
P- Solo hay una cosa en la que no. Y es que yo me meto a veces demasiado en la conversación y se me olvida que hay una cámara, que hay un tiempo. Eso es lo único que nos ha traído luego como un: “Ey, parame bolas”. Porque Calle tiene como señales y ella me está diciendo como ya, o el invitado se tiene que ir o no sé, el manager allá atrás estresado. Entonces, eso ha sido el único tema que hemos dicho, como que tenemos que tener un movimiento clave o algo, porque yo podría durar ahí tres días.
C: Porque estos episodios no van con edición, o sea, es material muy crudo, tendrá un poquito de edición al inicio y al final, pero la entrevista como tal no tiene edición, entonces, yo no puedo parar a decirle: “Gorda, el tiempo”. Entonces, a veces me hace señas a mi atrás y yo estoy como en la corto ahora.
P: No, curiosamente tenemos como los nortes muy similares. Entonces, en las decisiones creativas siempre queremos lo mismo. Es como: “¿Qué tal si hacemos uno…? ¿Y si hacemos coffee sessions?”. Y la otra es como: “Sí, yo quería eso”. O sea, nos sabemos leer muy bien, como los cambios, no sé a qué se debe. De pronto, a los 10 años que llevamos juntas.
C: Creo que llevamos tanto tiempo juntas y tanto tiempo trabajando juntas, que el reto no ha sido como tal, por ejemplo, este tipo de proyectos, porque nos conocemos muy bien y podemos llegar a acuerdos muy fáciles y a escuchar también qué tiene por decir la otra. Como que yo respeto mucho las ideas que sea que tenga Poché y ella respeta mucho también mis ideas y podemos intentar crear algo con eso que tenemos las dos, acá no hay como una competencia de qué idea gana. No, es como, “¿cuál es la idea mejor?”. O sea, qué es lo mejor. Y creo que, como siempre, andamos con esa mentalidad, es muy fácil justamente poder encontrar eso y trabajar juntas.
P: Es una buena pregunta, porque sí creo que tenemos nuestros propios límites. Pero no siento que los hayamos marcado. Creo que hacemos un orden según el invitado y su historia, y va pasando más en la conversación, como que cada una va decidiendo, supongo, hasta qué punto contar cosas que encuentren como similitud.
C: Creo que nunca hemos sido vocales al respecto, pero, por ejemplo, en cuanto a cosas muy personales, Poché siempre ha sido un poco más vocal en redes sociales respecto a tu vulnerabilidad. Yo he sido siempre un poco más privada respecto a mi vulnerabilidad. Entonces, creo que entendemos muy bien y Poché entiende muy bien como hasta aquel lado yo le digo como no quiero que vayamos tan adentro eso mío. Y yo también sé que, si ella va a empezar a hablar, yo la dejo. Yo no empiezo tampoco a sumar más cosas a su historia, porque justamente es algo de ella que ella va a querer compartir, que ella lo comparta hasta donde ella quiere. Entonces, como que nos entendemos muy bien en esos límites de cada una, hasta dónde va cada quien.
P: Yo el otro día vi el video porque la cuenta de YouTube lo compartió en Twitter. Y me encanta. Yo, de verdad, siento que soy otra persona. O sea, mi esencia está ahí, pero yo creo que sí lo puedo nombrar y es como que tenía un caparazón demasiado fuerte, tanto que siento que me veo brava. En el primer video de YouTube tenía como con tanta timidez y estaba como tan incómoda en la cámara y que me vieran. Siempre he sido súper tímida, introvertida, que tenía este caparazón de verdad. Y aunque sigo siendo tímida, creo que es el cambio más grande que me ha dado redes sociales, abrirme al mundo y cómo dejarme ser vista, aunque no sea lo natural para mí.
C: Mío diría que todo lo contrario, porque somos muy contrarias la una a la otra, yo veo los videos anteriores y digo ¡wow! Yo no tenía vergüenza. A mí no me importa, era como “pon a grabar y ya”. Pero en medio de todo podía notar muchísima inseguridad en la que estaba ahí sentada grabando, como muchísima inseguridad en general. Y ahorita no me siento en ese lugar. Ahorita sí me da un poquito de vergüenza, Pero sí, creo que hemos construido cosas, hemos crecido, más que construido, es que hemos crecido muchísimo.
Éramos muy chiquitas, hemos madurado un montón, ya vamos como para dos años de terapia y muchas cosas aparte de terapia. Entonces, es como somos personas diferentes, pues porque viene con los años, ni modo.
P: Pero en una versión muy linda, porque sigue la esencia de ambas.
C: Exacto, la esencia está, pero somos versiones mejoradas, definitivamente.
P: No sé por qué, pero pensaba mucho en Karol G.
C: Iba a decir la misma persona.
P: Porque creo que es de las personas más auténticas y dulces, y la hemos conocido un par de veces y es como una vibra demasiado chévere. Sí, demasiado linda y me da mucha curiosidad, precisamente, el tipo de preguntas que hacemos en el podcast, que nunca lo he escuchado de ella, por ejemplo. Es una persona que tengo como en mente y lo he mencionado un montón de veces.
C: Esta segunda temporada nos emociona muchísimo porque algo que para nosotras es muy importante es escuchar el feedback (retroalimentación) y qué quiere la gente que consume nuestro contenido. Y escuchando el feedback de la primera temporada, uno, agregamos una sección. Aparte de los invitados, hay una sección que se llama Coffee Session, que es solo de nosotras dos, debatiendo temas controversiales o temas importantes entre las dos de una forma mucho más relajada. Justamente como el podcast ya es emocionalmente cargado, el nuestro solas, es mucho más charlada, tranquila, por más de que sean temas.
P: Ni siquiera ponemos luces, entonces ya nos pasó en dos episodios que se nos va oscureciendo… La gente quería escuchar más conversación y precisamente a veces poníamos mucho solo el spotlight en la gente y mucho feedback decían como “también compartan más de ustedes”. Lo relajamos un poquito porque a veces se nos iba demasiado deep. Tiene como cositas más divertidas en donde los invitados nos cuentan como sus pedidos de café y todo esto, porque acabamos también de sacar nuestra marca. Entonces, tiene como una montaña emocional, como más amplia, diría yo. Y vienen invitados, demasiado cool, la verdad.