Giselle Blondet tiene un papel importante en la nueva temporada de Nuestra Belleza Latina. Esta vez, junto a Daniella Álvarez, Jomari Goyso y Adal Ramones, es parte del jurado que aconseja a las chicas a mejorar para seguir en la competencia. Sin embargo, este domingo fue diferente e inesperado. Hace unos días, la primera reina del certamen y hoy presentadora del show, Alejandra Espinoza, tuvo que ser hopitalizada por síntomas severos de los que aún no obtiene un diagnóstico claro.
En honor a su amista, Giselle tomó las riendas y el micrófono para convertirse, nuevamente, en la presentadora del reality de belleza de Univision.
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Cambios en el reality
Había muchas dudas sobre lo que pasaría el fin de semana. Si Alejandra estaría repuesta al punto de volver al set o quién tomaría su lugar en este papel en el que se ha desempeñado a la perfección gracias a su título como Nuestra Belleza Latina en 2007.
Giselle, de vuelta a la conducción
Giselle, de vuelta a la conducción No había mejor opción que Giselle Blondet para conducir el programa, no sólo por su gran experiencia luego de ver pasar a candidatas y reinas frente a las cámaras, sino también por lo gran amiga que es de la mexicana.
Un show dedicado a Alejandra Espinoza
“Nuestra querida Alejandra Espinoza ha tenido una situación de salud. En este momento lo más importante es que ella está bien, en casa y seguro nos está viendo”, dijo muy contenta Giselle. “Me he vuelto a poner mi vestido de conductora para apoyarte, Alejandra, como lo he hecho desde el día en el que te conocí, desde el día uno. Te mando un beso”, agregó para su gran amiga.
Belleza en rojo
Para esta noche, Giselle deslumbró con un vestido largo y rojo. Con una abertura en la pierna derecha y asimétrico en las mangas, la también escritora lució elegante. Un cinturón rojo con hebilla plateada y llena de piedras brillantes, hizo juego con las sandalias plateadas que llevó. El cabello, suelto, perfecto para una noche de gala en la que se busca a la próxima reina de belleza.
Un vestido preparado
“Son tantos años desde que tuve la oportunidad de comenzar con NBL y hoy estoy aquí apoyando a mi adorada Alejandra que está recuperándose”, contó Giselle ante las cámaras. Sobre su look, reveló que era un vestido que ella y su estilista ya tenían en mente, pero que iban guardando para más adelante, quizá para la final. “Y Jamás nos hubiéramos imaginado que íbamos a utilizarlo como ahora”, dijo la presentadora.
El mensaje más lindo
“Te quiero, Ale, y sé que pronto estarás completamente recuperada. Eres mi primera reina, sabes lo que significas para mí y lo orgullosa que siempre estoy de ti”, anotó Giselle en sus redes en una dedicatoria especial para la primera reina del show. Junto a ella, las lindas imágenes de aquel día en el que Alejandra recibió su corona.
La respuesta de Alejandra
“Hoy sera un gran show @nuestrabellezalatina”, escribió el domingo por la tarde. “GRACIAS @giselleblondet por ayudarme hoy con el show ♥️☺️ y también Gracias a quienes ustedes no ven pero haces este gran show posible y estar pendiente de mi salud son lo MAXIMO MAXIMO MAXIMOOO✨✨✨”.
Una amistad que se nota
Giselle, siempre al pendiente de su amiga, escribió en la publicación de Alejandra: “Te quiero mi @alejandraespinoza y sabes que siempre cuentas conmigo. Hoy estamos todos pensando en ti y seguros en nuestra fe de tu recuperación. 🙌❤️”.
Alejandra Espinoza, en recuperación
A media semana, Alejandra Espinoza alertó a sus seguidores luego de publicar una fotografía desde el hospital y con una nota de su hijo Matteo en la mano: “Te amo, mamá. Eres la mejor mamá del mundo”.
Al pendiente de su salud
Su esposo, Aníbal Marrero, envió un mensaje para los seguidores de Ale, en el que informaba que seguían esperando noticias de los médicos. El coreógrafo reveló a Francisca Lachapel en Despierta América, que desde hace días se sentía mal y la llevaron de emergencia al hospital por fuertes dolores de cabeza, parálisis facial y la pérdida de visibilidad de un ojo.
Alejandra, desde el hospital
Un día después, Alejandra reapareció en las redes sociales para informar que estaba mejor, que los médicos le habían dado buenas noticias confirmando que no había algo grave, pero tampoco descubrieron qué le había pasado. Por suerte pudo regresar a casa para estar junto a su familia.