Con profunda tristeza, se confirmó el fallecimiento del empresario Jaime Camil Garza, padre de los actores Issabela y Jaime Camil, quien lamentablemente partió luego de haber permanecido algunas horas en el hospital, de acuerdo con información compartida por algunos amigos y familiares cercanos al empresario, como el yerno de Camil, Sergio Mayer. Aunque hasta el momento ningún miembro del círculo más cercano a don Jaime se ha manifestado al respecto, ni se han revelado las causas de su muerte, algunas personalidades del mundo empresarial y del entretenimiento, así como allegados a la familia han enviado sus condolencias por esta irreparable pérdida. Tal fue el caso del periodista Joaquín López Dóriga, compadre del fallecido empresario, quien fue la persona que reportó la hospitalización de su amigo y dio a conocer la causa probable de la muerte don Jaime. “Mi querido compadre Jaime Camil Garza vive sus últimos suspiros. No soporta la septicemia catastrófica que sufre. Les pido otra oración por él”, compartió en su perfil de Twitter.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la septicemia catastrófica o sepsis ocurre cuando el organismo produce una respuesta inmunitaria “desbalanceada, anómala, frente a una infección”. Es decir, que el sistema inmunológico en un humano se sobrecarga al reaccionar de forma extrema frente a un agente infeccioso, lo que puede provocar daños en los tejidos, insuficiencia multiorgánica e incluso la muerte. Este tipo de padecimiento generalmente está relacionado con infecciones del sistema respiratorio, al aparato urinario, o en la piel del sistema gastrointestinal.
Desafortunadamente, con frecuencia, la sepsis pasa inadvertida o es diagnosticada de forma errónea, sobre todo cuando comienzan a presentarse los primeros síntomas, precisamente cuando podría ser tratada de forma oportuna y salvar la vida de quien la presenta. Es por eso que la tasa de letalidad de este padecimiento es tan alta, pues incluso existen casos de personas que han sufrido de una septicemia catastrófica, sin siquiera saber que tenían una infección en el cuerpo. De acuerdo con la OMS, cada año, aproximadamente, 31 millones de personas sufren un episodio de sepsis. De estos, unos 6 millones de pacientes no logran recuperarse y mueren.
¿Cuáles son los síntomas?
Es importante estar al pendiente de cada uno de los cambios que el cuerpo pueda presentar cuando se tiene una infección, ya que depende de la atención oportuna, que la persona que la padezca pueda salvar su vida o evitar daños mayores a los órganos. Entre los síntomas que se presentan ante una posible sepsis se encuentran: la respiración y frecuencia cardíaca rápida, dificultad para respirar, confusión o desorientación, dolor o molestia extrema, fiebre, escalofríos o sensación de mucho frío, así como piel húmeda o sudorosa.
Las personas más vulnerables ante la sepsis son los niños menores de un año, adultos mayores a los 65 años, así como personas con afecciones crónicas como diabetes, enfermedad pulmonar, cáncer y daño renal. Además de las personas con sistemas inmunitarios débiles, así como mujeres embarazadas. De hecho, las infecciones que resultan después de un parto por cesárea o un aborto, están relacionadas con la sepsis. La OMS estima que a nivel mundial, “por cada mil mujeres que dan a luz, 11 experimentan graves disfunciones orgánicas debidas a una infección o mueren”, por lo que representa la tercera causa de muerte materna.