Los alcances de la tecnología nos han permitido en la actualidad ver el mundo desde otras perspectivas. Literalmente. Con la llegada de las apps de geolocalización a la mayoría de los teléfonos móviles, ahora podemos viajar a cualquier parte del mundo desde la palma de nuestra mano, así como ubicar a personas y lugares en tiempo real con tan solo compartir nuestra ubicación. De hecho, actualmente no podríamos imaginar el mundo sin este tipo de herramientas que sin duda han venido a cambiar la vida de millones. Prueba de ello es la historia de Saroo Brierley, un hombre originario de India, que tras perderse en una estación de tren en 1986, pudo volver a casa 25 años después gracias a la aplicación Google Earth, pionera en este tipo de tecnología.
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Saroo nació en Khandwa, Madhya Pradesh, en el seno de una familia muy pobre. Su padre abandonó a su familia desde que él y sus hermanos eran muy pequeños, por lo que su madre tuvo que arreglárselas sola trabajando de sol a sol como obrera de la construcción. Sin embargo, el salario que recibía no era suficiente para alimentar a sus hijos, por lo que ellos también tuvieron que buscar un trabajo y así juntar lo suficiente para sobrevivir día a día. Fue durante una de las andanzas de Saroo en búsqueda de trabajo, que por accidente se perdió en un tren que lo llevaría hasta Calcuta, a más de mil 500 kilómetros de su ciudad natal y a 14 horas de viaje. En ese entonces, el pequeño de tan solo cinco años apenas sabía comunicarse con claridad y se le dificultaba incluso pronunciar su propio nombre.
Sin tener idea del lugar en el que estaba y consciente de que se encontraba lejos de casa, Saroo sobrevivió en las calles alimentándose de lo que encontraba en el suelo. Mientras tanto, a miles de kilómetros la tragedia abrazaba a su familia. Y es que además de buscar desesperadamente al pequeño sin éxito, uno de sus hermanos murió atropellado por un tren. Por fortuna, el destino llevó a Saroo a un orfanato, donde fue adoptado por una pareja australiana que de inmediato le entregó todo su amor. Además, Saroo ahora tenía también un hermano que fue acogido por sus nuevos padres el mismo día de su adopción.
Los años siguientes fueron muy buenos para el pequeño polisón, pues logró adaptarse rápidamente a su nueva familia, aprovechando al máximo la segunda oportunidad que la vida le dio. Sin embargo, Saroo no dejó de pensar en su familia y de hecho nunca la olvidó. Fue por eso que con el auge de las apps de geolocalización como Google Erth y dispuesto a reencontrarse con sus orígenes, Brierley comenzó a hacer cálculos, atando cabos y rastreando paso a paso todas las rutas posibles que lo llevaron hasta Calcuta, hasta que por fin dio con su lugar de nacimiento, apoyado en la aplicación desarrollada por Google.
Reconociendo su hogar
Fue gracias a las imágenes aéreas y en 3D que esta herramienta ofrece de prácticamente todos los rincones del mundo, que Saroo pudo ubicar su lugar de origen e incluso la casa donde creció, conectando sus recuerdos a las imágenes que veía en su pantalla y siguiendo paso a paso la travesía que lo separaró de su familia. Fue así que, una vez seguro de que el lugar que encontró gracias a Google Earth se trataba de su hogar, decidió viajar hasta su pueblo natal, con la completa aprobación de sus padres adoptivos, reencontrándose con su madre biológica 25 años después en 2011.
Las historia de Saroo tal vez te suene conocida, pues su caso fue retomado en 2016 en Hollywood y llevado a la pantalla grande en la película Lion, protagonizada por el actor Dave Patel y Nicole Kidman, logrando seis nominaciones al Oscar el siguiente año.