Como pocas veces, Ariel López Padilla protagonizó una sincera charla con la periodista Mara Patricia Castañeda a quien le reveló varios detalles de su vida, desde sus inicios en la carrera de la actuación, hasta cómo reconstruyó la relación con María Levy, la hija que tuvo con la fallecida Mariana Levy a quien, antes de que la actriz muriera, no había visto en más de cuatro años. En esa entrevista el actor recordó por qué decidió ceder la patria potestad, de su hija a Talina Fernández, quien se encargó de criar a la hija de Levy, quien actualmente tiene 23 años de edad.
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Padilla narró como, luego de la muerte de Mariana, Talina Fernández lo buscó para plantearle la posibilidad de que la niña se quedara a vivir con ella: “Talina me llama y me dice, ‘Ariel yo quiero que María se quede conmigo’, le digo, ‘Talina me estás pidiendo que me arranque el corazón’, porque yo no tenía hijos en ese entonces. En ese momento hablé con mi mamá que, era psicóloga, le dije dame tu opinión, porque no quiero tomar una decisión así, me dijo: ‘Mira, acaba de perder a su mamá y quitarla de su entorno, después de que no has estado con ella los últimos cuatro años sería un daño irreversible para ella’”.
Tras escuchar el consejo de su mamá, Ariel le dio a conocer la noticia a Fernández: “Fue ahí cuando le hablé a Talina y le dije: ‘confío en ti, creo eso nos va a ayudar, te va a ayudar, no a que compenses, pero va a ayudar’. Con el tiempo me pidió la patria potestad porque mi carrera me llevaba de un lado, para el otro, Gabriela, que era la abogada, me dijo: ‘mira Ariel, lo que pasa es que si llegara a estar enferma tendríamos que buscarte a ti y si tú estás grabando, en el Amazonas, ¿cómo le hacemos para una autorización? o si ella quiere viajar, entonces no había otra figura más que entregar la patria potestad”, recordó.
El hecho de que María no creció a su lado provocó que él tuviera que trabajar mucho para reconstruir la relación con la joven, con quien actualmente se lleva de maravilla, incluso, tiene un lugar muy especial en la casa familiar del actor, donde sus hermanitos menores la adoran. Ahora que la convivencia con su hija está en un excelente momento, el actor revela por qué ha decidido mantenerse al margen de todos los asuntos que tienen que ver con la herencia de Mariana.
“Dentro de, mis pocas o muchas posibilidades, le di todo lo que tenía a Mariana. Cuando regresamos de Perú le regalé una camioneta nueva, todo lo que se invirtió en la casa con las construcciones y remodelaciones, también iba mi dinero y yo nunca reclamé nada. Si te fijas, cuando murió Mariana yo nunca dije, ‘yo quiero ser albacea’, porque no es mi papel, hasta la fecha no me meto con los asuntos que traen de herencia”, explicó el actor.
Aseguró que cuando su hija habla del tema, por alguna circunstancia, el prefiere no enterarse: “María llega y, cuando empieza a hablar con mi esposa, por algo, yo me retiro a mi cuarto, a leer o a hacer otra cosa porque no me interesa involucrarme en algo que no es mi derecho, el patrimonio de María, Paula y José Emilio, es de ellos y lo tienen que resolver ellos”, aclaró.
Ariel aseguró que lo que a él realmente le interesa es seguir fortaleciendo los lazos con María: “Yo en lo que me he enfocado en que mi hija se una a mí, a mi vida, a mi familia, que sea feliz”, explicó el actor quien aseguró trata de apoyar en todo a la joven, quien hace un tiempo decidió dejar la escuela para seguir su sueño de convertirse en fotógrafa, una actividad que la apasiona y por la que está trabajando muy duro: “Yo siempre, hasta el día de hoy, veré por lo que es mejor para ella”, finalizó.