Fue en mayo de 2018 cuando, de forma sorpresiva, Michelle Renaud y Josué Alvarado, papá de su hijo Marcelo, protagonizaron un reportaje en conjunto, para las páginas de ¡HOLA! México, en el que revelaron que habían decidido divorciarse. Aunque en aquel momento ninguno de los dos quiso dar detalles de las razones que los llevaron a poner punto final a su relación, con el tiempo, la actriz se ha ido sincerando sobre esta situación.
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Esta semana, Michelle se convirtió en la invitada de la sección, del programa Hoy, Ponle la cola al burro, comandada por Jorge Van Rankin, donde abrió su corazón y narró un poco de cómo fue su historia al lado de Pipo (como le dice de cariño al papá de su hijo): “Él era mejor amigo de mi hermano, nunca me gustó, nunca me llamó la atención y, un día, de la nada como que me estuvo como tirando la onda y yo dije ‘si yo se la sigo, se va a echar para atrás, porque es el mejor amigo de mi hermano, o sea, ¿qué está haciendo?’. Y se la seguí y no se echó para atrás y, de ahí, nunca nos dejamos hasta 8 años después”, explicó en la primera parte de la entrevista.
Renaud continuó recordando cómo fue que planearon convertirse en padres: “Yo lo decidí hoy y a la semana ya estaba embarazada, así de rápido (…) Fue lo más feliz de mi vida porque yo me voy a Tailandia y, entonces, estoy en el avión y empiezo a ver que hay queso y dijo ‘¡Ay!, se me está antojando el queso’, pero yo llevo siendo vegana muchos años y, de pronto, él me habla y me dice tengo un dolor de cabeza muy fuerte y, le dije, yo también tengo un dolor de cabeza muy fuerte, ¡estamos embarazados!”.
Aunque de primer momento no había contemplado el matrimonio, en medio del embarazo creyó que era lo mejor para su bebé: “Yo no me quería casar, pero cuando estoy embarazada, los primeros 3 meses, la hormona se m volvió loca, odiaba a todo el mundo (...) de pronto dije: ‘mi hijo no va a nacer si no estoy casada. Me tengo que casar porque Marcelo tiene que saber que lo planeé y que fue de amor'. Llego en la noche con Pipo y le digo ‘oye, me quiero casar’ y me dice, ‘yo pensé que no te querías casar, pues ¡casémonos!”, contó.
Si bien, Michelle y Josué ya tenían varios años de relación, con el matrimonio y con la llegada del Marcelo, la actriz comenzó a detectar comportamiento, de parte de ambos, que no consideraba saludable para el pequeño: “A veces cuando estás tan enamorado permites cosas, los dos permitimos cosas y de pronto no teníamos la madurez para tener una relación tan larga”, explicó. Conforme fue avanzado el matrimonio Michelle descubrió que algo no iba bien: “Era conflicto, amor, conflicto, amor, éramos codependientes uno del otro y era una relación muy tóxica”, narró recordando la razón que la llevó al divorcio.