La mayoría de los fans de Emma Watson la recuerdan en su papel como Hermione Granger, la valiente y astuta amiga de Harry Potter (Daniel Radcliffe). Pero, Emma no sólo quería olvidarse de su personaje para hacer crecer su carrera, también quería dejar de pensar como ella y conocerse mejor como persona.
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Miles de chicas en el mundo quisieran tener la vida de Emma Watson por su fama, belleza física y el reconocimiento como una de las actrices más talentosas de su generación. Sin embargo, la joven confesó a la revista Porter que en el tiempo en el que se proyectó la saga de Harry Potter, su vida se basó en interpretar a su personaje a la perfección en vez de dedicarse a ella y saber qué le gustaba o el tipo de opiniones que tenía sobre los temas que tanto le cuestionaban los medios. Incluso, dijo haber sentido celos de sus amigas por llevar vidas "normales" y ocuparse en cosas como teñirse el pelo o decidir cuál era su color favorito.
"Me sentía aterrada por el interés global que despertó mi vida desde que tenía 10 años de edad", recordó. Para ella, ser una de las invitadas principales en las alfombras rojas tampoco era nada emocionante y optó por una actitud muy privada cada vez que un reportero o fotógrafo se acercaba a ella. Aceptó que inscribirse en la Universidad de Brown fue la mejor decisión de su vida porque le permitió tener ese espacio para ella que tanto necesitaba.
Emma también se sinceró sobre lo mucho que le afectó el divorcio de sus padres cuando ella tenía cinco años de edad. En sus relaciones amorosas buscaba una "fórmula perfecta" para vivir en pareja, aunque después entendió que no existe y su mayor lección es saber que "para el amor no hay reglas".
La actriz abrió su corazón para revelar sus inseguridades porque, a sus 25 años, considera que son cosa del pasado. "Por primera vez en la vida me siento cómoda conmigo misma", explicó. "Tengo muchas cosas que decir y quiero ser más auténtica. No quisiera que esta gran separación entre mi vida profesional y privada siga existiendo". Ahora que se conoce un poco más, Emma puede seguir con su carrera como actriz con más entusiasmo. En sus planes a futuro está el estreno de la nueva versión de La Bella y la Bestia, que es dirigida por Bill Condon.
¿Ya nos sigues enPinterest? Haz clic y "pinea" con nosotros.