Georgina Rodríguez es conocida actualmente por su faceta de modelo, influencer y empresaria, así como por su relación amorosa con Cristiano Ronaldo, padre de sus hijos. Sin embargo, muchos años antes de saltar a la fama, esta mujer ya brillaba en los escenarios gracias a su talento en la danza. Recientemente ‘Gio’ recordó aquellos días de su infancia como bailarina de ballet, provocando ternura entre sus seguidores al mostrar imágenes poco conocidas de ella.
Este 29 de abril, Georgina tomó sus historias de Instagram para compartir un par de nostálgicos videos de su niñez. El primero de ellos, de apenas unos segundos de duración, mostraba a una pequeña ‘Gio’ ataviada en un tutú blanco arrodillada en el piso junto a varias compañeras. El tema que acompañó esta escena fue ni más ni menos que El Lago de los Cisnes, una de las obras más famosas del mundo del ballet.
En el siguiente fragmento de video se podría apreciar a Georgina bailando hábilmente como parte de la coreografía. Aunque la duración de las imágenes también fue muy breve, en esta historia la modelo compartió un detalle más sobre aquel recital: “1998”. Al parecer este fue el año en el que la hoy celeb participó en la obra, por lo que han pasado ya unos 27 años desde entonces.
No es la primera vez en estos días que Georgina hace referencia a la danza clásica en sus redes sociales, pues para la última publicación en su feed de Instagram se volvió a calzar unas zapatillas de ballet. El pasado 28 de abril, la modelo publicó un carrete de fotos en las que se le ataviada con top y minifalda tableada de Alo Yoga, marca de la que es embajadora. Si bien estas prendas no son precisamente para bailar ballet, sí lo fueron los zapatos que usó. Además, complementó su atuendo con unas medias blancas traslúcidas y un cárdigan de color rosa bebé, a juego con los listones con los que peinó su melena oscura en dos trenzas.
Georgina demostró en su publicación que, pese al tiempo que ha pasado desde sus lecciones de ballet, sigue conservando la flexibilidad y la gracia en sus movimientos, pues en algunas de sus fotos posó como toda una bailarina profesional. “Una muñeca”, comentó su amiga Daniela Ospina. “Hermosa bailarina”, expresó por su parte Lauren Sanchez.
Georgina y las valiosas lecciones que le dejó el ballet
Desde muy pequeña, Georgina mostró interés por el ballet, por lo que su madre la inscribió en clases de danza clásica. En su infancia y adolescencia fue parte del Joven Ballet del Pirineo, en su natal Jaca, en España. Sin embargo, con el paso de los años y su salida de su comunidad, se fue separando de este mundo.
“Para la disciplina y el alma yo creo que es lo mejor. A mí el ballet de pequeña me ayudó mucho. En mi infancia fue la clave, mi vía de escape. Me ayudó a evadirme de muchas cosas”, confesó Georgina en su serie en Netflix en 2022 al visitar la Royal Opera House en Londres, lo que consideró como un sueño hecho realidad. “Sin duda la maestra de mi vida fue la danza. Te enseña a saber que te enseñen, a saber compartir, a que nadie te regala nada. Para mí el baile significa todo. Sé que soy lo que soy gracias al ballet. En momentos oscuros me iluminó, fue la luz de mi vida, así que le agradezco muchísimo a mi madre por haberme apuntado”, reflexionó.