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Aunque Carlos Baute es un hombre de familia, ha tenido que encontrar el balance entre su carrera y su vida personal. Algo que ha logrado con ayuda de su esposa, Astrid Klisans, quien se ha volcado en el cuidado de sus tres hijos, mientras el intérprete se enfoca en su vida profesional. Y aunque Carlos procura hacerse presente en los momentos más importantes de la vida de sus pequeños, lo cierto es que a veces ha llegado a perderse de instantes irrepetibles debido a su agenda. Tal y como sucedió recientemente, cuando no pudo acompañar a uno de sus retoños a su primera confesión, la cual forma parte de su preparación para poder hacer la Primera Comunión. Algo de lo que habló con ¡HOLA! durante su paso por la alfombra roja de los Premios Platino 2025, a la cual asistió de la mano de su amada esposa.
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Con la sinceridad que suele caracterizarlos, Carlos y Atrid hablaron de cómo han logrado hacer equipo para que sus hijos no estén solos en ningún momento. "Alguien se tiene que quedar y esa soy yo, y la verdad que muy contenta, felices, los niños supergrandes, y bueno, tenemos que dar un poco la cara en la casa, por todo lo que él no está", nos contó Klisans.
Fue entonces que Carlos intervinó para lamentar el no poder estar siempre para sus pequeños. "Yo a veces me he perdido de momentos que son terribles, pero trato de no perderme muchos", dijo el cantante, a lo que su esposa agregó: "Es un padrazo, cuando está, está al un millón por ciento", apuntó.
El intérprete de Colgando en tus manos reveló que hace unos días no pudo estar presente en un momento muy significativo para uno de sus hijos, pues como parte de su preparación para poder recibir el sacramento de la Primera Comununión, debía confesarse. "Fue la primera confesión, me la perdí, va a hacer la Primera Comunión el año que viene", contó el artista.
Lo dan todo por sus hijos
Sin embargo, tanto Carlos como Astrid se han encargado de hacer conscientes a sus hijos de que los padres no siempre pueden estar, algo que poco a poco han ido aceptando. "Ahorita que fue la primera confesión de mi hijo mayor sí que estaba un poco triste: ¿Por qué mi papá no está? Soy el único que no está su popá', y yo: 'Bueno, no eres el único y no pasada nada, tienes que aprender a vivir con esto, y luego tu papá sí estará en otro'. Hay que quitarle un poco de hierro y bueno, que aprendan a sobrevivir, es la vida que tenemos", apuntó Klisans.
Por su lado, Baute agregó: "He estado en otros momentos que otros padres, es complicado. Al final, los madres y padres estamos tratando de turnarnos, a veces he estado en muchos momentos y otros no he estado, porque es complicadísimo el trabajo", aseguró.