El Papa Francisco ha demostrado una verdadera pasión por la vida luego de haber estado hospitalizado por más de un mes a causa de una afección respiratoria bastante delicada. Luego de ser dado de alta el 23 de marzo, el Sumo Pontífice ha intentado reincorporarse a sus actividades poco a poco, aunque con el reposo recomendado por sus médicos como prioridad. Con ello en mente, pero también dispuesto a saludar a algunos de los feligreses en Roma, apareció por sorpresa este jueves en la Basílica de San Pedro, en donde dio la bendición a los presentes.
El originario de Argentina llegó en silla de ruedas provocando la emoción de quienes estaban en el lugar en ese momentos, ya que, a sabiendas de su reposo post hospitalario, tenían pocas esperanzas de verlo. El padre llegó cerca de la 1:00 pm, hora local, a la Basílica para observar cómo quedó la restauración de la zona de Cátedra, para después rezar en la tumba de San Pio X, de quien es devoto y a quien rezó el domingo pasado. Los restauradores se mostraron emocionados por la visita del padre, quien elogió su trabajo.
Si bien su estado de ánimo le ha permitido salir a encontrarse con la gente, los cuidados de su salud aún son importantes. Por ello el Papa Francisco llevaba una manta en las piernas, para asegurar una cálida temperatura; Además de las puntas de oxígeno, recomendadas por sus médicos como parte del tratamiento que debe llevar en casa luego de presentar una delicada neumonía de la que salió victorioso.
El encuentro del Papa con el rey Carlos III y la reina Camilla
La mejora en el estado de salud del Papa es visible, prueba de ello es la reunión privada que tuvo esta semana con el rey Carlos III y la reina Camilla de Reino Unido; quienes visitaron Italia de forma oficial pro primera vez desde que fueron coronados. La cita originalmente había sido cancelada debido a la salud del sacerdote, pero su ánimo le permitió reunirse con ellos durante 20 minutos.
En su charla, el Papa felicitó a los reyes por su 20° aniversario de bodas, el cual celebraron el 9 de abril justo en medio de su visita a Italia. "Sus Majestades se alegraron mucho de que el Papa se encontrara lo suficientemente bien como para hospedarlos en una reunión privada y de haber tenido la oportunidad de compartir sus mejores deseos en persona", expresa un portavoz del Palacio de Buckingham.