Todo parece indicar que la salud del Papa Francisco va en franca mejoría. Tras haber pasado 37 días en el hospital, luego de haber sufrido neumonía bilateral y de haber presentado varios episodios de crisis respiratorias, el Sumo Pontífice fue dado de alta hace apenas unas semanas y volvió a su residencia de Santa Marta en El Vaticano. Sin embargo, se dijo que el Papa permanecería en recuperación y bajo observación médica, por lo que para retomar su agenda pasarían algunas semanas más. Es por eso que la aparición de Francisco en la Plaza de San Pedro de este domingo ha sido celebrada por todos los fieles, quienes no lo han soltado de la mano y han permanecido en oración por su salud.
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La aparición del Papa Francisco en la Plaza de San Pedro no fue fortuita, pues elegió una fecha sumamente significativa para hacerlo. Y es que este domingo de llevó a cabo la misa por el Jubileo de los Enfermos, por lo que el Santo Padre quiso enviar un mensaje de esperanza y dignidad, a través de su propia convalecencia y debilidad, pues lo hizo desde su silla de ruedas y recibiendo oxígeno en todo momento. “Gracias a todos y feliz domingo”, fueron las breves palabras que expresó Su Santidad a la multitud.
Además, el Papa preparó un texto en el que hizo un llamado a no apartar la mirada del sufrimiento humano, el cual fue leído por el arzobispo Rino Fisichella, durante la homilía. "Afrontar juntos el sufrimiento nos hace más humanos. Queridos hermanos y hermanas enfermos, en este momento de mi vida comparto mucho con ustedes: la experiencia de la enfermedad, de sentirnos débiles, de depender de los demás, de tener necesidad de apoyo. No siempre es fácil, pero es una escuela en la que aprendemos cada día a amar y a dejarnos amar, sin pretender y sin rechazar, sin lamentar y sin desesperar, agradecidos a Dios y a los hermanos por el bien que recibimos, abandonados y confiados en lo que todavía está por venir. La enfermedad es una de las pruebas más difíciles y duras de la vida, en la que percibimos nuestra fragilidad. Como lamentablemente vemos que a veces suele pasar, no apartamos el dolor de nuestros ambientes. Hagamos más bien de ello una ocasión para crecer juntos, para cultivar la esperanza gracias al amor que Dios ha derramado".
Durante su trayecto de la puerta del Vaticano al altar y de vuelta, el Papa Francisco se mostró emocionado y sonriente, por lo que no dudó en acercarse a los fieles y saludarlos cálidamente. Alrededor de 20 mil creyentes se encontraban en la Plaza de San Pedro este domingo, entre pacientes, voluntarios y personal de salud, que han peregrinado a Roma este domingo para cruzar la ‘Puerta Santa’ por el Jubileo.
¿Volverá a sus actividades normales?
Aunque el Papa Francisco ha vuelto a su residencia de Santa Marta en El Vaticano, su equipo médico ha detallado que continuará de forma parcial con terapias farmacológicas orales, además de un periodo de convalecencia de al menos dos meses, por lo que no podrá reintegrarse a sus actividades de forma inmediata. En ese mismo sentido, se ha explicado la razón por la que el Sumo Pontífice deberá cumplir con este tiempo de recuperación en casa. “El hospital, aunque parezca extraño, es el peor lugar para una convalecencia: es el lugar donde se contraen más infecciones", explicó el doctor Sergio Alfieri en una rueda de prensa. "Durante el periodo de convalecencia no podrá mantener sus citas diarias habituales", agregó.