Los últimos dos años no han nada fáciles para Dani Alves, pues su exitosa carrera en el futbol se vio opacada por una fuerte acusación de abuso sexual que condujo a su arresto. Sin embargo, el pasado 28 de marzo, el futbolista brasileño, quien se encontraba ya bajo libertad condicional, fue absuelto de su condena. Esta noticia ha sido seguida por un inmejorable anuncio: el embarazo de su esposa Joana Sanz, con quien se reconcilió luego de que el escándalo alcanzara su matrimonio.
Este 31 de marzo, la modelo compartió la buena nueva a través de su cuenta de Instagram, aunque fue muy cuidadosa de no mencionar al futbolista. En su extenso mensaje, Joana reflexionó sobre la presión a la que se enfrentan las mujeres para ser madres y compartió los retos que enfrentó en su intento de embarazarse. “No quería compartir nada hasta que fuera más que evidente, pero quise compartirlo por las que están en la lucha”, inició la guapa española, quien fue captada el pasado 30 de marzo en Barcelona junto a Dani, luego de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña revocara la condena de cuatro años y medio del brasileño.
Joana compartió que, pese a la “aterradora” presión social para tener hijos, nunca tuvo “instinto maternal, ese deseo de tener hijos o de que me guste cargar el bebé de alguien”. Sin embargo, esa visión cambió hace unos años cuando se abrió a la idea de incursionar en la maternidad. “Hace cinco años me planteé con mucho miedo la idea de ser madre. Miedo porque un ser humano dependerá de mí para sobrevivir, miedo de no trabajar, miedo de perderme yo como mujer”, confesó. “Pero esto es otra historia”, advirtió.
A continuación, la esposa de Dani detalló las adversidades que ha enfrentado: “Lo que venía a contar es que una mujer de 27 años sana se encuentra con dos FIV (fecundaciones in vitro), tres pérdidas y de últimas una operación de trompas sumado a la aparición de endometriosis”, contó. “Me hice pruebas de todo tipo a lo largo de los años, con unos embriones divinos y sin encontrar el por qué a nada”, continuó.
La modelo admitió que la atormentaba “la frustración y el por qué ‘todas’ se embarazan como por arte de magia”, pues se dio cuenta de que la perseverancia y el trabajo duro que ha usado como medios para lograr sus metas no aplicaban en la concepción. “Para colmo me tuve que tragar la dichosa pregunta de ‘¿para cuándo el bebé?’, una y otra vez con tanto dolor en el pecho”, contó.
Joana y su ‘arcoíris lleno de amor’
Joana, quien se casó con Dani Alves en 2017, confesó que a raíz de una dolorosa pérdida hace un par de años la invadió una triste sensación, la cual cambió con su embarazo. “Perdí a mi madre hace dos años, no tengo padres ni hermanos, la sensación de orfandad y vacío me ha acompañado hasta el día que escuché el corazón de mi bebé por primera vez”, contó la modelo en cuyo video se le veía aplicándose algunas inyecciones antes de que finalmente mostrara la prueba de embarazo positiva, y después la imagen de ultrasonido de su bebé.
“Mi último embrión congelado, mi última esperanza de tener esa razón por la que ser fuerte en la vida. Aquí está, sana y creciendo”, compartió en su mensaje. “Y yo sé que fue mi madre quien me la envió para que nunca más me sienta sola, para que le eche ganas a la vida y tenga este arcoíris lleno de amor después de tanta tormenta”, agregó en su publicación. Y aunque reconoció tener temor ante la incertidumbre, animó a quienes viven una situación similar. “Aún no me lo creo y me despierto en la madrugada con el miedo de ver las sábanas llenas de sangre o cierro los ojos en las ecografías hasta que escucho que todo está perfecto. Todo llega, no desistas”, concluyó.