Alba Colón, la boricua que soñó con ser astronauta y hoy triunfa en el automovilismo: ‘Si es lo que quieres, no puedes rendirte’

Mi función son varias cosas y una de las de las más importantes es que yo estoy trabajando en lo que se llama el centro de comando. Por ejemplo, tú has visto en NASA que hay un centro de comando. Entonces yo trabajé en el centro de comando, soy la directora y tengo alrededor de 15 a 18 ingenieros que trabajan todos los fines de semanas proveyendo data a nuestros equipos de carrera de la manera que NASCAR hace el deporte. No todos pueden viajar a la pista. Hay un número regulado de personas que pueden viajar, y muchos de los ingenieros se quedan aquí en Charlotte, North Carolina, y nosotros nos comunicamos enviando información, trabajando en la estrategia de los carros y eso. Sé que hay mucha ingeniería, tiene que ver más con data y eso es lo que nosotros hacemos principalmente y una de mis funciones principales.

Bueno, mi papá. Mi papá es doctor y no ingeniero. Pero él le encanta la matemática, la ciencia y desde que yo era bien pequeñita eso era todo, matemáticas y ciencia, porque a él le encantaba. Lo que me fascinaba era cómo él podía leer un libro de ciencia, de matemática y realmente se sentaba conmigo a estudiar y se dedicaba las horas para explicarme. Y de allí fue que nació todo. Yo nunca tuve en mente a otro ingeniero que yo pude haber admirado porque nunca conocí a un ingeniero hasta que llegué a la universidad. Por eso para mí es bien importante ahora que ir a escuelas elementales, a intermedias para que jóvenes, especialmente muchachas hispanas, vean: “Mira, si tú quieres hacer el tipo de trabajo que yo hago, yo soy un ejemplo y hay muchos más ejemplos”, pero para esa época no era así. todo lo que yo sabía era a través de televisión, periódicos, revistas.

Cuando empecé no fue fácil. Voy a ser sincera acerca de eso, no fue fácil, no había casi mujeres. Cuando yo llegué no había hispanos realmente tampoco. Y también yo tenía el problema del inglés, yo estaba hablando español. (Era necesario) para poder entender lo que era este mundo, y además, para que los demás pudieran entender: “Mira, yo tengo la misma capacidad. Yo estudié ingeniería. Todo eso. Y yo puedo hacer el trabajo”. Era un poco difícil al principio poder entender como una mujer puede estar haciendo esto, pero bonito ahora es que hay muchas mujeres que son ingenieras, hay mujeres que son mecánicas, hay mujeres que están trabajando en lo que se le llama el pit crew, cambiando las llantas del automóvil. Ha cambiado mucho, muchísimo y ahora hay mucho más hispano también, como Daniel Suárez, el corredor. Así que han sido muchos años, pero estamos trabajando bien, fuertemente para poder enseñar la diversidad, que hay en Estados Unidos.

Definitivamente que pensé: “Qué estoy haciendo aquí”. Pero mira, de la manera en que yo soy está bien llorar, o sea, uno puede llorar, puede darse el permiso de gritar, de hacer todo eso, pero al otro día tú tienes que seguir de nuevo. Y para mí esa siempre ha sido mi filosofía. O sea, no tengo miedo de que alguien me vea, de que estoy siendo débil, pero yo sé que al próximo día yo no sigo con lo mismo, porque yo creo en lo que yo estoy haciendo. A mí me encanta lo que yo estoy haciendo, pero sí ha habido veces que no ha sido fácil. Pero mi amor, mira, acabo de cumplir 30 años en el deporte, así que imagínate que uno ha visto de todo, pero a mí me fascina lo que hago. Así que date un tiempito para respirar, pero tienes que seguir, no te puedes rendir, si esto es lo que tú quieres, no te puedes rendir.

Bien orgulloso, bien orgullosa. Definitivamente, a él le debo mucho, a mi mamá, a mis padres, a mis padres. Le debo donde estoy y lo que hago.

Estoy bien orgullosa de ser latina, bien orgullosa de dónde vengo. Y yo creo que la ética de trabajo de mis padres fue lo que me ayudó mucho llegar aquí. Y uno no entiende eso cuando es pequeño, pero mirándolo ahora, al ver todos los sacrificios que mis padres hicieron y todo lo que ellos me enseñaron todos los días es por eso que he podido llegar hasta donde yo estoy. Los padres son muy importantes, muy importantes. Así que hay que preguntar, hay que tener mentores, si uno quiere hacer un sueño realidad lo puede hacer y hay muchos que te van a ayudar.

Uno nunca se puede rendir. Eso siempre lo digo, no te puedes rendir. La educación para mí ha sido bien importante para poder llegar aquí y no importa que estudies ingeniería o estudies otra cosa. Eso no importa, pero el educarte en lo que quieres hacer es bien importante. Como te digo, el no, el no rendirme, el también buscar la ayuda porque no hay nada malo con pedir ayuda…. Pero de nuevo, si esto es lo que quieres hacer, tienes que trabajar bien fuerte todos los días para poder hacerlo.

Ayrton Senna. O sea, yo no sabía mucho de carreras, pero siempre seguí la Fórmula 1 para ver lo que él estaba haciendo, y lo que él hizo y toda su pasión en lo que hizo fue increíble. Y Sonia Sotomayor, una puertorriqueña que ha llegado al Corte Suprema. Yo sé que muchos no hubiesen imaginado eso, y ver todo lo que ella ha trabajado para poder llegar aquí, es como we can do it, todos lo podemos hacer, Así que es un orgullo, sinceramente.

Yo me pongo a hacer mi trabajo y a veces no pienso en todo lo que he pasado para poder llegar aquí, pero al fin y al cabo quiero ser recordada como alguien que realmente trabajó duro para llegar a donde estaba y que también abrió paso a otros que están detrás de mí. A mí me encanta pasar tiempo hablando con niñas pequeñas. Niñas y niños que quieren llegar a este tipo de carrera porque hay que ayudar a los otros. Así que si yo puedo ser recordada como una persona que tuvo empatía, que tuvo compasión y que pudo ayudar a otros a llegar aquí.