Las oraciones por la salud del Papa Francisco se han multiplicado este viernes 28 de febrero luego de que El Vaticano emitiera un alarmante comunicado en el que informa que el Santo Padre, de 88 años, sufrió una "crisis respiratoria aislada". Esto luego de días en los que había presentado una mejora significativa que encendía las esperanzas entre los feligreses en todo el mundo, quienes continúan al pendiente de su estado.
"El Santo Padre, esta tarde, después de una mañana alternando entre fisioterapia respiratoria y oraciones en la capilla, experimentó un episodio aislado de broncoespasmo. Esto causó un episodio de vómitos - lo que le llevó a inhalar un poco - y un repentino empeoramiento de su condición respiratoria", se puede leer en el reporte oficial. Y agregan: "El Santo Padre fue sometido rápidamente a una aspiración bronquial (para limpiar sus vías respiratorias) y fue puesto en ventilación mecánica no invasiva, lo que mejoró sus niveles de oxígeno".
En el comunicado explican que el originario de Argentina está en pleno conocimiento de lo sucedido, aportando su cooperación en pro de su mejora. "Ha permanecido alerta y consciente en todo momento, cooperando con tratamientos terapéuticos", indican. Sin embargo, asegura que "el pronóstico, por lo tanto, permanece cauteloso".
Papa Francisco, dos semanas hospitalizado
La salud del Papa se convirtió en un motivo de alerta desde el pasado 14 de febrero, cuando luego de su servicio matutino, fue trasladado al hospital Gemelli de Roma, en donde fue diagnosticado con bronquitis que se derivó en doble neumonía. Desde entonces, El Vaticano ha estado actualizando su condición a través de breves comunicados en sus redes sociales oficiales, en donde informaron que el fin de semana pasado su condición se había complicado tra un fuerte ataque de asma que lo hizo requerir una transfusión de sangre. A pesar de ello, en días recientes mostraba una significativa mejoría.
A lo largo de su papado, Jorge Mario Bergoglio, quien asumió el cargo en 2013, ha sido hospitalizado en varias ocasiones, pero esta sería la cuarta más preocupante por ser la más larga. En años anteriores, el Máximo Pontífice se sometió a diversas operaciones de colon y abdomen; además de que desde hace algunos años ha tenido dificultad para caminar, por lo que se ha presentado en la mayoría de sus eventos en silla de ruedas.