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A poco de cumplirse dos meses del lamentable fallecimiento de Silvia Pinal, Alejandra Guzmán ha hecho un balance de cómo se encuentra en estos instantes. Refugiada en los recuerdos de su madre, la cantante sigue adelante, orgullosa del legado de la diva de México y del inmenso amor que se profesaron mutuamente. Sin embargo, la Guzmán vive motivada por el gran regalo que le hizo doña Silvia poco antes de partir; tener el privilegio de reconciliarse con su hija, Frida Sofía, de quien estuvo distanciada varios años. La intérprete confirmó en una reciente entrevista que ambas siguen en contacto desde entonces, feliz de vivir esta nueva etapa de su relación con la joven.
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La Guzmán reitera su amor por su hija
Alejandra se dispuso a conceder una entrevista telefónica al programa televisivo Ventaneando, el cual celebró 29 años de transmisión a través de la frecuencia de TV Azteca. Con motivo de esa fiesta, la intérprete fue invitada a compartir unas palabras, instante en el que aprovechó para responder a la pregunta de la periodista Rosario Murrieta, quien quiso saber si ella y Frida Sofía seguían en contacto. “Claro, ese fue un momento único y la verdad se lo agradezco a mi madre porque es uno de los grandes regalos que me dejó y claro que estoy en contacto con mi niña, si la amo con toda mi alma…”, dijo durante en vivo.
Con un tono de entusiasmo, la Guzmán también reiteró el gran amor que tiene por Frida, quien desde hace varios años radica en la ciudad de Miami. Alejandra también dio todo el crédito a su mamá, quien asegura fue la encargada de hacer posible esta reconciliación en un instante tan significativo. “Tú sabes cuánto la amo y ella a mí, y solo Silvia Pinal lo logró. Mira qué pedazo de abuela, qué pedazo de madre tengo yo y la tendré siempre en mi corazón…”, dijo conmovida la cantante.
¿Cómo se encuentra Alejandra?
En medio de su duelo, Alejandra se enfoca en sus actividades profesionales y en su familia. Sin embargo, lleva consigo los recuerdos de doña Silvia Pinal, un periodo de constantes cambios emocionales pues la ausencia de la primera actriz sigue pesando entre los suyos. “A veces triste, a veces melancólica pero orgullosa de poder tener su sangre, todo lo que me heredó en mi sangre, el talento, las ganas de chambear, de salir adelante y ahorita estoy en su casa, estoy con mis hermanos viendo lo de la Inmobiliaria Periférico y resolver muchas cosas que están pendientes…”, dijo en la llamada realizada desde la ya conocida residencia de Silvia, ubicada en el Pedregal de la Ciudad de México.
Más allá del vacío dejado por Silvia en el plano terrenal, Alejandra dice estar tranquila por tener la certeza de que su madre por fin descansa y permanece junto a sus seres queridos, su fallecida hermana Viridiana y su abuela, María Luisa Hidalgo. “Estoy contenta, estoy sana, llena de compromisos, de trabajo, de proyectos… Me fui a la playa en donde estuvo ella y la recordé, la huelo, la siento, la extraño y la admiro pero está en un mejor lugar, está con Viri, está con Merilú y está bien, no está sufriendo ya de tanta herida, tanta cosa… Mi mami está en todos lados, es inmortal mi madre, la veo en las películas y la siento, estoy ahorita en su casa, qué más quiero… Todo México la ama, la respeta, la quiere, muy amada…”, dijo en su enlace con Ventaneando.
