,type=downsize)
Han pasado más de 20 años desde que el matrimonio de Tom Cruise y Nicole Kidman llegó a su fin, pero la expareja sigue unida por un vínculo: sus hijos. Los actores comparten a Isabella y a Connor, a quien adoptaron mientras estuvieron casados. Sin embargo, es sabido que la actriz no tiene una relación con los chicos desde hace mucho, y ella misma ha dejado entrever que las creencias que ellos profesan tienen algo que ver. No obstante, una reciente pérdida en la vida familiar de la intérprete podría estarla motivando a reconciliarse con sus hijos mayores.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
De acuerdo con reportes de la revista New Idea, Nicole está afligida porque su madre, fallecida el pasado mes de septiembre, no tuvo la oportunidad de reconectarse Isabella y Connor, quienes actualmente tienen 31 y 29 años respectivamente. “La pérdida de su madre ha hecho que Nicole no quiera perder más tiempo. A Janelle le dolió que ella y su marido Antony estuvieran distanciados de (Isabella y Connor)", contó una fuente a la mencionada publicación.
“Eran sus dos primeros nietos y en su día estuvieron muy unidos. Fue un profundo pesar no poder verlos en persona antes de que muriera”, dijo el informante, quien además señaló que el arrepentimiento de la actriz estaba “alimentando su necesidad de una reconciliación adecuada”.
Tom y Nicole adoptaron a Isabella en 1992 después de que la actriz se sometiera a varios tratamientos de fertilidad sin éxito, y Connor se unió a la familia tres años después. Sin embargo, el matrimonio de estas estrellas de Hollywood no terminó en 2001 luego de 11 años.
En un inicio, la actriz de Big Little Lies fue un poco reservada sobre la situación con sus hijos, pero en 2018 se sinceró al respecto. “Tengo que proteger esas relaciones. Sé que renunciaría a mi vida por mis hijos porque es mi propósito. Son adultos. Ellos son capaces de tomar sus propias decisiones. Han tomado la decisión de ser cienciólogos y, como madre, mi trabajo es amarlos”, expresaba entonces en entrevista para Who Australia. “Yo soy un ejemplo de esa tolerancia y eso es en lo que creo. Así que ese es nuestro trabajo como padres, ofrecer siempre un amor incondicional”, agregó.
Si bien Nicole afirmó seguir amando a Tom incluso después de su divorcio, finalmente se dio una nueva oportunidad en el amor y fue flechada por el músico Keith Urban. La relación inició en 2005 y al año siguiente se casaron en Sídney. De ese matrimonio nacieron Sunday Rose, en 2008, y Faith Margaret, en 2010. Ambas son hijas biológicas de ambos, y la más pequeña vino al mundo por medio de gestación subrogada.
La dolorosa pérdida de su mamá
A inicios de septiembre, mientras Nicole se encontraba en el Festival de Cine de Venecia, recibió la dura noticia del fallecimiento de su madre. La actriz no lo dudó ni un momento y regresó a casa, dejando a alguien para recibir un galardón en su nombre.
“Hoy llegué a Venecia para enterarme inmediatamente después de que mi maravillosa y valiente madre, Janelle Ann Kidman, acababa de fallecer. Estoy en shock y tengo que estar con mi familia, pero este premio es para ella”, expresó la directora Halina Reijn al leer las palabras de Nicole en la ceremonia de la Copa Volpi. “Ella me ayudó y me hizo ser como soy. Mi mayor gratitud es poder decir su nombre ante todos ustedes. Mi corazón está roto. Los quiero. Nicole”, agregó en su mensaje.