Con un nuevo proyecto en español, María Elena Salinas nos revela qué le dijo Jorge Ramos antes de anunciar su salida de Univision

Va dirigido hacia la comunidad hispana. Son conversaciones con expertos en temas de interés a nuestra comunidad, con activistas, funcionarios, personalidades destacadas, individuos que directamente son afectados. A mí me aterra cómo se ha propagado la desinformación. Por eso pensé que valdría la pena hablar con personas que conocen bien estos temas, personas que no solo informan, pero también nos inspiran y nos ayudan a ver un futuro mejor Desde que comencé mi carrera, hace más de cuatro décadas, me di cuenta de que la comunidad hispana tiene sed de información verídica y creo que ese fue el papel de los medios en español durante décadas. Y ahora el panorama ha cambiado mucho y hay muchas fuentes de información, pero no todas son confiables. Las redes sociales están llenas de desinformación.

Yo creo que nosotros los periodistas siempre buscamos fuentes confiables. Y como dije anteriormente, en las redes sociales, ya sea en redes sociales, en YouTube o en WhatsApp o en todos estos canales, no hay fuentes establecidas, fuentes creíbles. Yo considero que soy una persona que no me dejo llevar por eso. Entonces, trato de buscar la información y las personas que creo que nos van a dar una visión más transparente, más clara. El primer episodio es sobre el voto latino o el voto de los latinos, y lo hago con Paola Ramos, una muchacha que conozco desde que nació y he visto crecer y desarrollarse. ¿Y por qué ella? Es joven, tiene experiencia en política y en periodismo y ha llevado años cubriendo esto, hablando, recorriendo el país, hablando con votantes. Entonces, no nos vamos a ir a la encuesta y a los números de lo que dicen las encuestas, donde entrevisten a unas pocas personas. Estamos siendo con alguien que ha hablado directamente con votantes, que ha analizado los cambios que ha habido entre la comunidad hispana y que me puede dar una perspectiva distinta. 

Y vamos a decir que también es una conversación generacional, porque yo llevo que 10 elecciones cubiertas desde los 80 hasta ahora y la comunidad hispana ha cambiado. Entonces, con ella yo también aprendo. Aprendo de cómo ha cambiado esta comunidad y cómo han cambiado los latinos como votantes.

Sí, y sabes que me he diversificado, vamos a decir, profesionalmente. Hay que recordar que cuando me fui de Univisión, yo dije que yo quería seguir contando historias a diferentes audiencias en distintas plataformas Y eso es lo que he estado haciendo. Primero en Investigation Discovery con mi propio programa, en la cadena CBS estuve dos años, en ABC llevo dos años y medio. Ese ciclo se cierra en diciembre y ahora este podcast, que es una nueva plataforma para mí. Y por primera vez siete años lo voy a hacer en español. Pero también me he diversificado como consumidora, porque yo escucho muchos podcasts, porque yo también obtengo mi información a través de plataformas digitales Y es así como está ocurriendo. Yo creo que la diferencia, yo confío en mi juicio, por lo menos, yo sé a quién creerle y a quién no creerle. Yo veo un programa de noticias y yo sé quién está dando su opinión y quién está dando datos. Y datos que pueden ser verificables. Así es que yo creo que es parte de la evolución de las comunicaciones. ¿Y quién sabe qué es lo que sigue? Los jóvenes son los que van a inventar cuál es la próxima plataforma, o cuál es la próxima forma de dar este tipo de información.

Exactamente. Sabes que es curioso, porque yo empecé a trabajar en televisión en 1981. Yo era una novata, estaba aprendiendo, pero lo que más me frustraba es que me cortaban mis reportajes. Que el reportaje es dos minutos y medio y que tiene que ser dos minutos. Y yo: “No, pero tengo que meter esto y tengo que... No le podemos cortar esa frase al invitado, al entrevistado”. O sea, siempre ha sido así. Ha sido mi frustración por más de cuatro décadas el tener ese tiempo límite. Una de las cosas que me gustó de poder trabajar en CBS, en ABC, porque hacía reportajes mucho más largos. Me encanta hacer documentales, me encanta hacer especiales. Y esto sí me da esa oportunidad de poder tener esas conversaciones a fondo sobre temas que lo requieren, que requieren una explicación, que requieren poner las cosas en perspectiva. Así es que es un privilegio el tener un poco más de tiempo para cubrir un tema de lo que podemos hacer en la televisión, definitivamente.

Yo creo que eso depende de cada tema. Yo no soy de las personas que piensa que uno no debe ser el centro de atención. Entonces, nunca quiero ser el centro de atención en un podcast así, pero puedo dar mi perspectiva, puedo hablar de mis experiencias. Como con Paola le pregunté: “Bueno, tu padre y yo llevamos pensando de que el votante hispano era así durante décadas y nos equivocamos”. Yo también quiero poder aprender. Pero yo no soy de las personas que le gusta compartir mucho la parte personal. Así es que yo creo que lo que quiero decir con eso es que va a ser una conversación donde yo estoy incluida en esa conversación, donde mis inquietudes también son expresadas en esa conversación con el invitado, donde mis puntos de repente son incluidos. Yo no creo mucho en dar opiniones ahí porque no quiero confundir a la gente y el día que yo de mi opinión voy a decir claramente esta es mi opinión. Porque es una cosa que a mí me aterra, la verdad. Me aterra cómo se ha propagado la desinformación. Me aterra cómo la gente únicamente quiere creer en cosas que van de acuerdo con su forma de pensar o con lo que contaron.

Es difícil decir, porque como te imaginarás, fueron 37 años en Univision y otros seis años que llevo trabajando en inglés, son más de 40 años que llevo en esa profesión. Así es que es difícil decirte que hay una entrevista... Yo creo que hay muchas, pero siempre me viene a la mente la entrevista con el subcomandante Marcos, que no me acuerdo si fue 2000 o 2001, después de que ganara en México el presidente Vicente Fox.

Y según los zapatistas, era el momento en que regresó la democracia a México. ¿Y por qué me impactó esa entrevista? Primero, porque fue muy difícil conseguir y tomamos mucho tiempo en tratar de conseguirla. Así es que esa me marcó y me dio una lección periodística también, como muchas otras. Hicimos la entrevista durante una hora con las preguntas que yo ya tenía escritas y planeadas para hacer el programa que planeábamos hacer. Y cuando terminó esa entrevista, yo le dije al subcomandante Marcos: “Gracias por darnos el tiempo, eso es todo”. Y él dijo: “No, disculpa que te hicimos esperar tanto tiempo. Sigue y pregúntame todo lo que quieras, el tiempo que quieras”. Y ahí empezamos una conversación sin preguntas escritas. Y resultó ser más interesante que todas las preguntas periodísticas que yo le había hecho.

 Así que a veces simplemente tener una plática con alguien, conocer un poco más a fondo a las personas que estás entrevistando, es muy valioso. Como dije anteriormente, a veces lo primero que hacemos es preguntarle a la gente a qué te dedicas, así que háblanos de tu profesión y de cuéntame tu historia. Y ya que conocemos a esa persona, es más fácil conversar sobre lo que hace. Y entendemos de repente por qué hace lo que hace.

No, para nada. No lo he hecho de menos, la verdad. Como te digo, yo hice muchas cosas que considero que fueron muy importantes. Yo terminé ese ciclo y el tomar la decisión de cerrar ese ciclo no es una decisión que tomas en un momento o por algún incidente. No, es algo que piensas y lo planeas. Y yo lo pensé y lo planeé por mucho tiempo, por lo menos tres, cuatro años, que yo había tomado mi decisión de que tenía que cerrar ese ciclo. Quizás puedes llegar a extrañar a compañeros, puedes llegar a extrañar a la audiencia, como dije anteriormente. Así es que no es algo que necesariamente extrañe. Yo cerré ese ciclo muy consciente de lo que estaba haciendo. No me quedó nada pendiente por hacer. Yo quería hacer algo distinto y he estado haciendo algo distinto y lo he disfrutado. Lo único que no he logrado ser dueña de mi tiempo, pero ahí voy, poco a poco, eso es más complicado, pero lo estoy haciendo.

Pero no lo extraño, pero sí lo valoro muchísimo, muchísimo, muchísimo. Una de las cosas que he aprendido desde que comencé a trabajar en inglés es la buena labor que hace la televisión hispana y los medios hispanos en comunicarse con nuestra comunidad de habla hispana, donde yo creo que vamos más allá de la información. Le metemos mucho corazón. Entendemos que hay un componente social y de servicio para nuestra comunidad y que ellos lo aprecian. Así es que valoro mucho esa etapa. Yo creo que fue una etapa muy importante en este país, porque la comunidad hispana y los medios en español fueron creciendo de la mano y se apoyaron los unos a los otros. Y no pudiera existir sin el otro. Así es que el haber vivido esas décadas de desarrollo, siento que fue un privilegio. Y lo aprecio mucho y lo atesoro mucho, pero tanto como decir que lo extraño como para volver, no. Esa parte no.

No me sorprendió. Yo lo hice y simplemente lo hice siete años antes que él, pero él tendrá sus motivos personales. Él me llamó el día en que iba a anunciarlo y me contó: “Quiero que sepas que lo voy a hacer”. Y me dijo: “Gracias por abrir la puerta”. Y yo: “¿Cómo que gracias por abrir la puerta?”. Y dice: “Sí, porque tú lo hiciste primero”. El día que yo anuncié que fue agosto del 2017, que yo me iba, me acuerdo de que Jorge me dijo: “Qué valiente. No sé si lo pudiera hacer yo”. Y ahora, yo le digo a él también: “Qué valiente”. Porque yo creo que uno sabe cuándo es momento de cerrar un ciclo. Yo creo que él se dio cuenta de que era ese momento, que era el mejor momento para cerrar ese ciclo. Y cuando se habla del fin de una era, no debe una connotación negativa. Eso no quiere decir que era la época de oro y que eso ya se acabó y que el resto no es bueno. No, no, no, no. Es una era que, como dije anteriormente, en la que los medios hispanos y la comunidad hispana fueron creciendo. 

Ahora se cierra esa era y comienza una nueva donde ya es una comunidad distinta, una comunidad más grande, más sofisticada, de mayor educación, más próspera y mucho más diversa, y que es mayormente bilingüe, que es mucho más joven de lo que era antes. Así es que esa es una nueva era. El hecho de decir que se cierra una era no quiere decir que la era que empieza no vaya a ser ni buena ni grande, sino es una nueva. Y eso es maravilloso. Yo creo que todos tenemos que irnos adaptando, ir creciendo. Y cada quien tiene su época. Yo tengo mi época, ahora Jorge tiene su época y Ilia también tiene su época, que me da mucho gusto por ella. Ella es parte de la era antigua y de la era nueva. Ella es la era de transición, en la que también es parte de ese ciclo que se cierra y del nuevo que se abre. Así es que es una transición perfecta.

Qué suerte tengo. Mi balance sería qué suerte he tenido y qué afortunada he sido de poder haber terminado en una profesión que me trajo tanta satisfacción y que me permitió influir en ciertas personas, informar a nuestro público. Espero poder haber inspirado. Y es curioso porque ves cuando alguien muere, entonces en los obituarios la gente que dice cosas buenas de quien... Yo todavía no me muero, pero tengo la fortuna que cuando me encuentro con jóvenes latinos, muchos vienen a decirme: “Crecí viéndote, gracias por informarnos. Me inspiraste para superarme o me inspiraste para ser periodista, las periodistas jóvenes”. O “me recuerdas a la época donde crecí mis padres o mis abuelos viendo la televisión en español”. Entonces, es una forma de dejar huella, no por presunción, yo no quiero decir: Eso es lo máximo, dejé huella, no. Es lo que yo escucho de la gente, y no nada más yo, todos los que trabajamos en la televisión hispana. Todos los que somos parte de esa era de la que hablamos, de esa era en la que fuimos creciendo juntos, la comunidad hispana. 

Fuimos parte de la historia y fuimos testigos de la historia. Así que qué honor, qué privilegio el haberlo hecho y poder haber recorrido el mundo contando historias para nuestra comunidad. Definitivamente, me siento una persona muy, muy, muy afortunada, pero sobre todo de ser mamá y de tener a mis hijas y de ahora tener más tiempo de estar con ellas.

Como una buena madre, por supuesto. Porque al final del día, como te dije anteriormente, no necesariamente eres lo que haces, eres quién eres, como mujer, como madre, como ser humano. Quizás me gustaría que se me recordara como una persona que trató de hacer una diferencia en su comunidad, en la sociedad, porque realmente me importa, porque mi corazón está ahí, porque no se trata de salir en la tele de tener un micrófono para autoglorificarse. Se trata de que utilices esa plataforma para el bien y que utilices esa plataforma para darle voz a quienes no tienen voz. Tú no les das la voz, tú les das la plataforma para que usen su voz.