Estrenada en 2022, Top Gun: Maverick fue la esperada película con la que Tom Cruise regresó a uno de los personajes más icónicos de su carrera. La cinta obtuvo un rotundo éxito en la taquilla, y ello se debió en buena parte a la extraordinaria forma en la que sus protagonistas interpretaron a habilidosos pilotos. Ahora, la producción del filme ha recibido una triste noticia, pues Chuck Coleman, el encargado de instruir al célebre actor y a sus compañeros sobre maniobras aéreas, ha fallecido en un trágico accidente.
El reconocido piloto acrobático e ingeniero de 61 años, famoso por su participación como instructor de vuelo de Tom, y actores como Miles Teller y Glenn Powell en Top Gun: Maverick falleció el pasado 20 de octubre en un accidente aéreo durante la Exposición Aérea y Espacial de Las Cruces, en Nuevo México, en Estados Unidos.
Según reportó la agencia AP, Coleman estaba realizando maniobras acrobáticas en su avioneta Extra EA-300 cuando perdió el control de la aeronave, estrellándose a unos 1600 pies del aeropuerto de Las Cruces; fue declarado sin vida en ese mismo lugar.
El evento fue suspendido de inmediato y el aeropuerto fue cerrado mientras se realizaban los trabajos de recuperación del cuerpo. Se reportó que las autoridades locales y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte inició una investigación para determinar las causas del siniestro. Si bien habrá que esperar para que se esclarezca lo sucedido, se ha mencionado que algunos testigos dijeron que Chuck tuvo algunas dificultades con sus maniobras desde el inicio y que trató de estabilizar su avión antes de estrellarse.
Luego de conocerse el sensible fallecimiento de Coleman, Powell expresó sus condolencias, así como su admiración hacia él. “Aprendimos a volar de verdad, y eso se lo debemos a Chuck. Era un maestro del aire”, declaró en una entrevista con CBS.
Su trabajo en Top Gun: Maverick
Junto al equipo de entrenamiento, Coleman dirigió más los vuelos acrobáticos que sirvieron para que Cruise, Powel y Teller se prepararan para grabar sus escenas en los F/A-18 Super Hornet de la Marina de los Estados Unidos.
Cruise, quien es conocido por rodar sus propias escenas de acción, al parecer insistió en que sus compañeros vivieran la experiencia de volar en aviones reales y que no solo se limitaran a los efectos especiales. “Volábamos dos veces al día con todos los actores, y esto era sólo para que todos se acostumbraran a la orientación espacial, a hablar por radio, a los giros, a las pérdidas, al aterrizaje y al despegue”, contó Kevin LaRosa Jr., el coordinador aéreo de la película, a la revista Simple Flying.
Una vez que se el equipo consideró que los actores tenían una base sólida tras volar en aviones Cessna 172, pasaron al siguiente nivel. Chuck Coleman los llevó a volar en un Extra 300. “Al completar estas maniobras acrobáticas, entrenaron sus oídos internos para tolerar las fuerzas g que experimentarían al volar en los F-18”, detalla la publicación especializada. “Sin ese entrenamiento, no creo que las imágenes de la película se verían como se ven hoy”, aseguró LaRosa.