La vida del actor es tan cambiante que cada reto profesional deja una huella indeleble. Sin embargo, hay experiencias únicas, capaces de transformar la vida de los intérpretes de manera inimaginable. Con varios años de carrera, Danna García ha tenido la suerte de experimentar ese extraordinario proceso frente a las cámaras, esto tras interpretar a Abigail en la nueva película de la plataforma Canela TV, Amor a Fuego Lento, en la que además comparte créditos con Osvaldo de León. Sensible y un tanto conmovida durante nuestra charla con HOLA! Américas, Danna reveló cómo la tocó personalmente este proyecto, el cual teje la historia de un romance a partir de la experiencia gastronómica. Así mismo, se sinceró sobre cómo la maternidad le ha permitido potenciar la felicidad que prevalece a lo largo de sus días, inspirada por su hijo Dante, de siete años.
Amor a Fuego Lento retrata la vida de Miguel, un chef cuyo máximo deseo es obtener una estrella Michellin. Sin embargo, en el camino a la consolidación de ese sueño pierde a su madre, por lo que vuelve a su pueblo natal para despedirse de ella, sin imaginar que le heredaría un restaurante y que además se reencontraría con el gran amor de su juventud.
Danna, a corazón abierto: ‘Había perdido la frescura’
Sincera, Danna reconoce la gran valía de esta película, pues si bien está orgullosa de todos los papeles que ha interpretado en su carrera, Abigail logró transformarla de alguna manera, especialmente en el plano interpretativo. “A veces se pierde esa conexión con el alma, con algo que es más fresco y creo que Abigail me regaló la frescura. Yo había perdido de pronto ese sacudirse, de pronto como retomar la frescura que tiene ella y que tiene la película y ella lo necesitaba… Siento que yo ya me estaba volviendo demasiado técnica, entonces me regaló el disfrutar el momento. A través de ella yo disfruté el momento… Era todo tan familiar que tocó mi corazón esta película.”
Emotiva, la guapa actriz también destacó el otro gran regalo que le hizo esta película, pues compartir con el elenco el permitió encontrar a otra familia. “Era todo como si lo hubiera deseado, en la lista de deseos sí fue todo como mágico, como que fluyó, como que se dio y gané una familia… Era todo tan familiar que tocó mi corazón. Me conmuevo porque tú no sabes lo que fue para mí. Ahora todo se vuelve muy técnico y se pierde esa cercanía y en esta película me reencontré con muchas cosas hermosas, dentro y fuera de la película…”.
Inspirada por la maternidad
El privilegio de realizar Amor a Fuego Lento coincide con el gran momento que Danna García vive en lo familiar. Como mamá de Dante, dicha que comparte con su pareja, Iván García, la actriz sabe muy bien que algo cambió de raíz en ella a partir de recibir a su hijo. “Creo que a pesar de que yo vivía muchas experiencias creo que nada me hacía realmente feliz. Yo podía estar en el mejor lugar, rodeada de lo mejor, con un triunfo profesional… y yo no me sentía feliz, plena, algo me faltaba, a nivel personal sí, muchas cosas lindas, pero nada llenaba mi corazón. El día que fui mamá y quedé embarazada, fui feliz y no te lo sé explicar…”, dijo.
Visiblemente conmovida, Danna hizo énfasis en lo mucho que ser mamá la tocó desde lo más profundo, una faceta a la cual se ha entregado de manera incondicional. “La luz que llena mi vida es él, algo en mi vida… para mí el ser mamá es un subidón de amor, de energía, mi hijo me llenó de eso, yo soy muy feliz siendo mamá… Realmente me llena mi corazón ser mamá…”.
Llena de motivación, Danna también tiene mucho que agradecer por todo lo que la vida le ha permitido tener, no solo hacer lo que más le apasiona, sino también caminar de la mano de su familia. “Hoy de verdad te digo, desde que fui mamá entendí la gratitud enorme hacia la vida, hacia poder hacer lo que yo amo. Cada vez que alguien me llama para un personaje digo: ‘Gracias Señor por darme esta oportunidad’. Yo creo que hay un cambio de consciencia profundo y quiero que se vea en lo que hago…”, confesó.