Con 17 años de edad, Nina Rubín sabe muy bien lo que quiere. Así como su hermana Mía, decidió continuar con el legado musical de su padre, lanzándose como cantante, Nina quiere dedicarse por completo a sus pasiones. La menor de las hijas de Andrea Legarreta y Erik Rubín dio a conocer que ha decidido hacer una pausa académica, para dedicarse en cuerpo y alma a su carrera actoral y a su gusto por la música, una faceta que desea explorar de manera anónima, por lo que buscará lanzarse con una producción independiente.
La razón detrás de su decisión
Con madurez, Nina reconoció que prefería estar enfocada en sus objetivos profesionales, que estar en una aula; sin embargo, esto no quiere decir que no va a estudiar, la joven ya tiene planeado cómo va a cursar este grado: “Ahorita voy a hacer un examen, que es muy bueno, te dan un certificado para hacer la prepa, porque decidí personalmente salirme”, explicó en entrevista para el programa De primera mano.
Más sincera que nunca, Nina reconoció que, en este momento, su cabeza no está en el colegio; sin embargo, la preparación académica sí forma parte de sus planes a futuro y así lo explicó: “Siento que mi vida no va por ahí, claro que voy a hacer la universidad, por eso quiero tener un buen certificado, pero ahorita sí dije: ‘Quiero ser libre, quiero prepararme en las cosas que me encantan y tener el tiempo de hacerlo’”, explicó.
Nina confesó que este tiempo también lo va a dedicar a su proyecto musical. Como su hermana mayor, la joven quiere incursionar en la música, pero a su manera: “Estoy pensando hacerlo anónimamente y no por un tema de que me dé pena o que no quiera que sepan quién soy, es más para quien encuentre la canción y le guste y la escuche”, dijo la también actriz. Aseguró que sus temas los escribe desde el corazón, por lo que prefiere mantener el perfil bajo como compositora: “Es como hacer una catarsis y decir, todas mis emociones aquí se las entrego”, añadió.
Erik Rubín, su mejor consejero en la música
La joven compartió más detalles de por qué su concepto musical saldrá de manera anónima: “Se ha convertido en algo muy personal, de por sí ya tengo la parte pública que es la actuación, me gustaría mantener esa parte más privada”. Como su hermana Mía, en casa, cuenta con el mejor maestro musical, Erik Rubín: “Siempre le pido opinión a mi papá, pero todo es mío, todo lo que hago es muy personal, todas mis producciones, armonía y melodía, incluso, mi estilo para cantar, que no es convencional es mío, pero sin duda, el consejero número uno es mi papá”, finalizó.