Dueña de una exitosa carrera en la televisión, Alejandra Espinoza se ha ganado el cariño del público y no solo por su talento, sino también por su personalidad auténtica y transparente. La presentadora suele compartir con sus seguidores aspectos de su vida profesional y personal, incluidos algunas de sus vivencias más desafiantes. Recientemente reveló en sus redes sociales haber atravesado por días complicados, lo que de inmediato generó preocupación entre sus seguidores.
“He estado pasando no necesariamente los mejores momentos de mi vida”, confesó Ale este 9 de julio en una publicación en Instagram. “Y en estas semanas he aprendido tanto: A darle valor a las cosas que realmente importan y a dejar de pensar que tenemos un mañana seguro”, continuó en su mensaje.
“No había tenido la energía ni ánimo para correr, hoy me esforcé y en verdad es increíble cómo el hacerlo te aclara la mente y logra mejorar tu estado de ánimo”, agregó en su post, el cual acompañó de un video en el que se le veía calentando y corriendo al aire libre rodeada de naturaleza.
Sus seguidores no tardaron en reaccionar a sus palabras, y le enviaron cariñosos mensajes de ánimo y bendiciones. Aníbal Marrero, esposo de Alejandra, respondió a la publicación colocando varios emojis de corazón como señal de apoyo.
Si bien la presentadora mexicana prefirió no revelar los detalles de la situación por las que ha atravesado a últimas fechas, algunos de sus seguidores sospecharon que podría estar relacionada con su salud debido a que en su publicación admitió que no había tenido energía para salir a correr.
El duro momento en el que atravesó por una crisis de ansiedad
Alejandra se ha abierto anteriormente para compartir también lo que ha vivido en términos de salud mental. En marzo, la también actriz contó en el podcast de Alejandro Chabán que había vivido una fuerte crisis de ansiedad.
“Yo tuve un ataque de pánico espantoso en Las Vegas”, confesó entonces. “Estaba celebrando con Aníbal nuestro aniversario, estábamos super tranquilos”, continuó, detallando que mientras camina con su esposo por un casino sintió un hormigueo en los brazos, falta de aire y taquicardia.
“Yo pensé que me iba a morir. El corazón me iba a estallar. Fue horrible”, expresó mientras las lágrimas inundaban sus ojos al revivir aquel momento. “No podía siquiera explicarle a mi esposo... Cuando yo llegué al baño, empecé a llorar y le estaba pidiendo a Dios que por favor me dejara ver a Matteo, estaba tirada en un baño pidiéndole a Dios que nada más quería ver a Matteo”, contó. Y así como se apoderaron de ella esas terribles sensaciones, la dejaron: “Se te pasa de la nada, es muy raro”, dijo.