Redescubrirse a través de la piel de nuevos personajes es para Natalia Tellez y Sebastián Zurita una experiencia incomparable. Entregados a su pasión por los escenarios, los actores se han embarcado en una aventura televisiva colmada de humor e ingenio al ser parte del elenco de la serie titulada Profe Infiltrado, la cual se estrena a través de la plataforma ViX el próximo 7 de junio. En entrevista con HOLA! AMÉRICAS, los actores nos compartieron su sentir sobre lo fascinante de este proyecto, y como personalmente los ha tocado involucrarse en esta historia protagonizada por el actor Memo Villegas, y en la cual también participa Marimar Vega.
Profe Infiltrado cuenta la historia de Julián (Villegas) quien, a pesar de ser criminal por influencia familiar, es un tipo sensible y de buen corazón. Sin embargo, al ser capturado con mercancía ilegal de electrodomésticos es obligado por el comandante Aurelio Maldonado (Sebastián Zurita) a infiltrarse como profesor de educación física en la escuela secundaria de Paola (Diana Carreiro), la hija del mafioso para el que trabaja. Ahí, su vida se cruza también con la de Sofi (Natalia Téllez), una profesora de literatura capaz de hacer conexiones especiales con sus alumnos.
Natalia tocó la vulnerabilidad a través de su personaje
“Mi personaje es como esta maestra con la que sí te identificabas en la escuela, que da clases de literatura, que quiere ser escritora, que tiene una conexión muy fuerte con sus alumnos. Eso me gusta mucho de ella, creo que le importa dejarles algo positivo a los alumnos y que se vuelvan personas de bien en la peor etapa de vida que es la preparatoria…”, expresó Natalia.
En ese sentido, la actriz arriesgó todo por darle a su interpretación un toque distinto desde su mirada personal, lo que le permitió incluso sentirse vulnerable. “La hice tartamuda, me costó muchísimo trabajo. Al principio me arrepentí mucho de haber propuesto eso, pero ya se habían filmado escenas y estuvo bien como experimento hacer a una persona que en su palabra no fluye. Es escritora, es profesora… al final fue muy bonito de hacerlo porque sí te vulnera, cuando empiezas a tartamudear te das cuenta de que la gente, inclusive los actores, se desesperan… como persona te pone en un lugar chiquito y muy sensible…”.
Zurita en la piel de un amenazante y encantador comandante
En la historia, Sebastián Zurita da vida al comandante Maldonado, un hombre que quiere ir más allá de las estructuras burocráticas y de su destino, por lo que pone en marcha algunas artimañas para lograr convertirse en alcalde de su ciudad. “Es un tipo corrupto que es capaz de hacer cualquier cosa por tratar de salir adelante y de alguna manera se va tergiversando a través de la temporada...”, compartió. Asumir este reto no fue sencillo, pero finalmente Sebastián logró consolidar una interpretación que le permitió cumplir con su propósito. “Siempre es divertido mantener esa tensión dramática pero al mismo tiempo que tengas una comedia interesante, porque al final de cuentas es el género que estamos haciendo... Lo interesante para mí en este personaje era cómo podemos ser alguien encantadoramente amenazante…”, respondió.
Zurita también destaca un rasgo importante de Profe Infiltrado, una historia que logrará conectar desde el primer momento con el público mexicano. “Nos reímos absolutamente todo y nos burlamos absolutamente todo. Creo, hoy por hoy, especialmente en este tipo de series en donde también estas tocando a los chavitos que están en la prepa. Ya no puedes andar con estos tabús y ya no puedes andar dándoles la vuelta. Tienes que hablar muy en seco, burlarte de todo, plasmar nuestras vivencias. Y todos los mexicanos sabemos que tenemos ese lado oscuro de México y luego tenemos un lado súper hermoso, entonces creo que eso es lo que nos da una dualidad muy interesante y hace que la serie se mantenga real y original y que no se sienta una adaptación o que venga de otro lado…”, dijo.
Horas de risa en el set de grabación
Para Natalia y Sebastián, filmar Profe Infiltrado implicó no solo entregarse a un reto profesional distinto y original en sus características. Lejos de la formalidad, la comedia también se volvió parte del elemento que aderezó la convivencia al interior del set de grabación, pues tras los cortes el buen ambiente nunca se apagó. “Es una delicia cuando haces comedia y teníamos que parar porque ya entras en este loop en donde nada tiene sentido y todo te empieza a parecer absurdo y gracioso, nos moríamos de la risa… Al final lo acabas sufriendo porque dices: ‘Está tu lado de actor, debería poder controlar la situación’, pero es una absoluta delicia poder hacer comedia y que tengan que frenar porque no puedes parar de reír, todo te da risa. Son de mis momentos favoritos y me pasaron mucho”, contó Natalia.