El verano se acerca y Evaluna lo sabe. Aprovechando el sol de Miami, la esposa de Camilo se dispuso a disfrutar de una jornada en la piscina, no sin antes, compartir con sus seguidores en Instagram una imagen en la que mostró su pancita en todo su esplendor . A sólo unos meses de recibir a Amaranto, su segundo hijo, la cantante posó sonriente frente al espejo, disfrutando a plenitud de la dulce espera, a pesar del susto que se llevó hace unos días, cuando sufrió una caída de la hamaca mientras dormía a hija mayor, Índigo.
Más feliz que nunca, Evaluna ha querido hacer partícipes a sus más de 21 millones de seguidores alrededor del mundo de esta linda etapa, como respuesta, sus fans se mostraron muy agradecidos de verla bien: “¡Hola panza!”, fue la frase que usó la cantante para acompañar esta instantánea en la que la vemos usando un bikini rosa. Esta no es la primera vez que la esposa de Camilo comparte una imagen en traje de baño presumiendo su baby bump, a finales de marzo, la joven publicó una foto desde la playa: “La panza va creciendo y la sonrisa también”, escribió en aquella ocasión.
El susto que pasaron
Hace unos días, Camilo contó detalles del susto que pasaron luego de que Evaluna y su pequeña hija Índigo sufrieran un accidente al interior del taller creativo del músico. Según relató el yerno de Montaner, se encontraba trabajando mientras su esposa arrullaba a su hija en una de las hamacas que colocó en la bodega industrial, con piso de concreto, que acondicionó como estudio: “Yo estaba en una reunión, a mi esposa le encanta subirse a las hamacas para dormir a Índigo”, comentó el cantante.
Camilo narró cómo fue que Evaluna sufrió una caída de la que afortunadamente resultó ilesa: “Lo vi todo oscuro, esos son los momentos que pueden ser mortales. Mi esposa estaba llorando en silencio, asustada. Tomo a Índigo y veo que ella está bien, pero tú no quieres que tu esposa con seis meses de embarazo se caiga de una hamaca”, dijo el cantante sobre el incidente que no pasó a mayores, pero que los hizo vivir momentos de angustía.
Amaranto, mejor que nunca
Según recordó el colombiano, una vez que cercioró de que, tanto su esposa, como su hija se encontraban bien, se mostraron agradecidos: “Nos acostamos un momento con miedo a decir ‘¿Y Amaranto?’”. A pesar de la preocupación y de la incertidumbre que sintieron tras la caída, una vez que su bebé reaccionó a los estímulos desde el vientre, se sintieron tranquilos: “Al final, todo perfecto. Amaranto pateó perfecto, todo estaba muy bien”, compartió Camilo.
