Feliz de la vida por tener esta gran oportunidad frente a las cámaras, Angélica Vale charló con HOLA! AMÉRICAS sobre su regreso como host a esta importante entrega, un papel en el que debutó en 2011 al lado de su ‘compadre’ Jaime Camil, y que tuvo lugar tan sólo dos días antes de su gran boda con Otto Padrón.
Siempre alegre, la hija de Angélica María nos reveló cómo es su relación con Clarissa Molina y Galilea Montijo; así como los detalles que dejará en manos de su estilista para lucir hermosa esa noche.
“A Clarisa Molina la conozco, pero poco, me va a encantar poder compartir el escenario con ella, con una nueva generación. También estoy con mi hermosa Galilea Montijo, que tengo años de conocerla y la quiero, así que estoy feliz”.
En su papel de mamá orgullosa nos detalla cómo van los planes de su hija, Angélica Masiel, para seguir los pasos artísticos de la familia y si es que sus hijos la acompañarán en esta experiencia en el Kaseya Center de Miami, Florida.
Y de lo más contenta por todas las cosas buenas que suceden en su vida personal y profesional, Angélica nos da su mejor consejo para quienes desean lograr una figura de impacto, tal como ella lo ha hecho.
Regresas a la televisión con este gran evento del talento latino, ¿cómo llegó la oportunidad?
“Sí, estoy feliz, de pronto me llamó Univision, me dijo que si me interesaba ser host ¡y bueno! No hay forma de decir que no, uno dice que sí a esas invitaciones tan hermosas que llegan de vez en cuando en la vida.
La verdad es que estoy muy emocionada de ser parte de Premio Lo Nuestro. Es un año muy especial, es la segunda vez que me toca ser host”.
Precisamente, la primera fue justo antes de tu boda y ahora con una hermosa familia. ¿Qué recuerdos te trae esta nueva oportunidad?
“¡Sí, dos días antes de casarme! En ese tiempo yo creo que ni me daba cuenta de lo que estaba haciendo, porque ahorita que lo pienso, no sé cómo me atreví a hacer Premio Lo Nuestro el jueves, y el sábado casarme. ¡Fue una locura! Pero los premios me trajeron buena suerte, así que espero que me traigan otra vez unos 13 años más de buena suerte.
En ese entonces éramos Jaime Camil y yo. Lo voy a extrañar esta vez”.
¿Qué te inspira esta entrega de premios?
“Premio Lo Nuestro, tiene una magia especial que no tiene ningún otro. No sé cómo explicarlo. No es ir a conducir cualquier otro premio. Es algo de lo que me siento privilegiada en poder regresar. ¿Qué te puedo decir? Estoy feliz de la vida y digo que es un año especial porque su creador acaba de fallecer hace semanas y era tío de mi marido; entonces lo siento todavía más especial y desde allá arriba debe estar muy contento”.
¿Cómo te empiezas a preparar para volver a estar frente a las cámaras?
“¡Tengo tantas cosas qué hacer en estos días! Ahora ya lo veo como una realidad, porque dije que sí pero ya cuando lo anuncias ves que va en serio. Es ahora que me están entrando los nervios.
Voy a estar viajando muchísimo, tengo la gira de ‘Vaselina’ que ya voy a terminar, porque por tantos compromisos que tengo después no voy a poder estar en todas las fechas. También tengo la radio aquí en Los Ángeles, soy mamá de dos niños... ¡Entonces son tantas cosas qué hacer!
Se me hace que voy a empacar a la familia completa, me voy a ir a Miami y voy a disfrutar todos los ensayos, las lecturas, todo lo que pueda de Premio Lo Nuestro.
Estoy muy emocionada de ver a todos los famosos que van a llegar ese día, a todos los nominados. Yo digo que voy más de fan que de host”.
¿Cómo fan de quién vas?
“¡De todos! El Recodo está nominado y me dio toda la emoción del mundo porque son amigos que quiero y que admiro, ojalá lleguen esa noche. Sé que va a haber muchos artistas famosos ahí, siempre llegan los mejores. En un Premio Lo Nuestro me tocó conocer a Bad Bunny, no iba yo de host, di un premio especial, y me tocó sentarme en la misma mesa que él”.
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¿Te acompañarán tus hijos en la alfombra magenta o en la ceremonia?
“Fíjate que no lo había pensado. Cuando trabaja mamá les digo: ‘Voy a trabajar, ahorita vengo’, pero no sé. Es algo que no he hablado con mi familia, aunque seguro Angélica sí va a querer desfilar por la alfombra; Daniel igual dice no, que mejor él se queda en la playa”.
Angéliquita es adorable, ¿cómo van sus planes de seguir tus pasos y los de la abuela en el mundo del espectáculo?
“¡Ahí van! Está en clases de teatro y de canto. En unos días va a hacer ‘Frozen’, le tocó el papel de ‘Elsa’ y está muy emocionada. Entonces quizá ella sí me acompaña.
Seguramente se va a querer colar en algún momento, por lo menos en la alfombra”.
¿Cómo ha sido el acercamiento con Galilea y Clarissa, ya se conocían bien?
“¡Nos acaban de anunciar todo el asunto! El lunes tuve la oportunidad de verlas a las dos en ‘Despierta América’ y me dio muchísimo gusto. Clarisa, adorable, la verdad qué padre poder trabajar con nuevas generaciones, con gente que está haciendo su propio camino y que lo está haciendo muy bien como ella; eso me da muchísimo orgullo.
¡Y con mi Gali! Imagínate, ya la conozco de toda la vida cada vez que nos vemos es sentarnos a chismear horas, así que de una vez les digo los productores de Premio Lo Nuestro, que nos citen desde antes, mínimo dos horas antes de que empiece el ensayo para que echemos el coffee Galilea y yo’.
Cuéntanos de los looks con los que te podremos ver esa noche.
“Eso es algo de lo que les voy a escribir a Galilea y a Clarissa para ver cuántos cambios llevan. Oí que Clarissa está diciendo que mínimo cuatro, entonces necesito hablar con ellas para ponerme de acuerdo.
Además, si pienso en qué me voy a poner, me vuelvo loca; eso yo se lo dejo a David Salomón, que es el que siempre me viste y la verdad siempre me pone hermosa. Voy a dejar que él se haga bolas, que se preocupe por los cuatro cambios o los que sean, eso ya no me toca a mí (risas). Y si salgo en las mal vestidas, pues le toca a él”.
Nos encanta verte feliz con tantas cosas entre manos, además de que luces espectacular, ¿tienes algún consejo para la gente que quiere lograr la figura que tanto anhelan?
“¡Sí, hagan ejercicio! No hagan dietas locas, no dejen de comer todo lo que dicen que engorda, nada más hay que balancearlo. Hay que tener una buena alimentación, lo que nos dicen siempre, pero luego nos cuesta tanto trabajo entenderlo. Y, señoras, si acaban de tener un bebé, vayan a ver a un endocrinólogo por el amor de Dios, para que les ayude con las hormonas. ¡Me tardé años en encontrar al mío, por eso se los estoy diciendo!
Y aunque no hayan tenido bebé, las hormonas son un tema muy importante y no nos damos cuenta.
Yo comía lechuga y no adelgazaba, entonces era una cosa espantosa y ya cuando estás comiendo lechugas un mes y ves que no adelgazas ni una libra, llega un momento que vuelves a comer sin que te importe la alimentación. Te hace más daño el dejar de comer todo tipo de comida y por eso luego engordas más, así que cuidado con eso. Sólo hay que tener una alimentación balanceada y hacer ejercicio”.
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