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Cada aventura que Juan Soler emprende a lado de Paulina Mercado se convierte en una oportunidad para que ambos se conozcan mejor, al mismo tiempo que fortalecen las bases de su noviazgo, el cual comenzó con una entrañable amistad que con el tiempo se transformó en un gran amor. Agradecidos por cómo se unieron sus caminos, la pareja ha podido compaginar a la perfección su relación con su carrera profesional, lo que les ha llevado a desarrollar nuevos proyectos laborales en conjunto, el más reciente de ellos se trata de En… Pareja2, un podcast enfocado en abordar temas del corazón y la complejidad de las relaciones interpersonales. Para el capítulo de estreno, el guapo argentino ha querido profundizar sobre su propia historia de vida recordando el duro episodio que enfrentó tras su divorcio de Maky Moguilevsky, un periodo del que salió adelante tras encontrarse a sí mismo.
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Juan Soler se sincerá sobre los motivos de su divorcio
En respuesta a la pregunta de Paulina sobre cómo recuperó la confianza en el amor, Juan Soler relató lo complicado que fueron los meses posteriores a su separación: “Cuando termina mi matrimonio sí hubo un tiempo muy oscuro en mi vida, fueron casi dos años… donde sí me eché un clavado dentro de mí porque me di cuenta que me había perdido”. Sincero, el actor reveló el motivo por el que la relación con la madre de sus hijas llegó a su fin: “Se acabó mi matrimonio, pero porque se había acabado Juan Soler, no estaba Juan Soler sobre sus bases, no estaba completo, estaba muy muy quebrado. Y todo lo que yo había ofrecido cuando empezó mi relación se había disuelto, había empezado a hacer todo en función, lo que es un grave error”.
Basándose en su experiencia, el conductor señaló que cuando se está en una relación las personas no sólo muestran su lado más sensible también experimentan determinados cambios condicionados en ocasiones por el temor a romper con la pareja: “Uno cuando se enamora, cuando toma un compromiso para toda la vida y todo esto, no tomas conciencia de que empiezas a entregar tus puntos fuertes, que dejas mucho más al descubierto tus puntos vulnerables y que te vuelves aparte una persona que dejó la esencia del verdadero individuo que se sumó a esa pareja en ese momento por inexperiencia, por amor muchas veces, por miedo a perder a la otra persona, por miedo a defraudar”, reflexión, “El miedo paraliza, enceguece, el miedo creo que es el peor enemigo que tiene un ser humano a la hora de demostrar tus emociones, atenta contra las emociones porque no te deja que fluyan naturalmente. Toda esa luz que uno tiene se va apagando poco a poco porque el miedo lo oscurece”.
Un nuevo comienzo
Al recordar cómo salió avante tras el final de su matrimonio, el actor contó que recurrió a la ayuda de una profesional para hacer frente a esta situación: “Cuando yo pasé este periodo con mi psicóloga, con muchas lecturas, yo iba a trabajar, regresaba”, añadió indicando que pese a tener una casa amplia pasaba prácticamente todo su tiempo en una sola estancia, “Tenía un departamento de cuatro habitaciones, pero vivía en la sala de televisión (...) deprimidísimo, fue una etapa horrible, donde cargaba energía en la mañana para ir a grabar, estaba en una comedia”.
Si bien, se trató de una etapa adversa y desafiante, Juan Soler pudo recuperarse a sí mismo luego de un proceso de introspección: “Comento que fue horrible porque es un estado que uno no le desea a nadie (...) Fue una época en la que realmente me enfoqué en Juan Soler para recuperar a ese Juan Soler que me había dado todas las satisfacciones que yo tenía hasta ese momento y luego de mi rompimiento tenía que recuperar a Juan Soler”.
