Salomé, la hija en común de James Rodríguez y Daniela Ospina, está muy ilusionada con la próxima llegada de su segundo hermanito menor, esta vez por el lado materno. Pero mientras llega al gran día de conocer a Lorenzo, la niña de 10 años se enfoca en su propia agenda, dando rienda suelta a su creatividad y expresión en el baile. Y esta semana nos dejó impactados con su talento sobre la pista, en donde demostró su flexibilidad.
Al ritmo de If the World Was Ending, de Evaluna y JP Saxe, Salomé cumplió un gran reto de baile del que se siente bastante orgullosa. “No fue fácil, pero lo logré ❤️”, anotó la niña junto al video de su performance en el E y S Dance Studio.
Salomé vestía un body negro con medias blancas Descalza y con una cola de caballo baja, empezó a moverse sobre la pista en donde ejecutaba movimientos bien calculados con todo el cuerpo. Vueltas de ballet, flexiones y acrobacias completaban esta rutina que no pasó desapercibida a ojos de sus padres.
“Muy orgulloso de ti. Te amo”, escribió el seleccionado de Colombia al ver a su primogénita dándolo todo en la pista. Y es que, desde muy pequeña, Salomé desarrolló un gusto especial por el baile que podría encaminarla a un futuro profesional.
La hermana mayor de Samuel no se frena ante ningún ritmo, y en varias ocasiones ha demostrado que puede bailar desde reggeatón hasta coreografías más complejas y en grupo con sus compañeras.
A la espera de su hermanito menor
Aunque el baile es una parte importante en su vida, otros detalles marcan sus días, como la próxima llegada de su hermanito, Lorenzo. El bebé, que espera ilusionada Daniela Ospina junto a Gabriel Coronel, está por llegar en un par de meses y la familia lo espera con mucho cariño.
A finales de mayo, la pareja reveló que la cigüeña traerá un niño a quien llamarán Lorenzo, nombre que, según Daniela, eligió la propia Salomé.
Para la niña será un nuevo inicio en la vida de hermana mayor, pues en casa de su papá convive con su consentido, Samuel, el bebé de tres años, hijo de James Rodríguez.